Este miércoles miles de argentinos piden justicia en las calles después de que se cumple un mes de la misteriosa muerte de Alberto Nisman, fiscal que acusó a la presidenta Cristina Fernández de encubrir un atentado.
Los medios argentinos especulan que la denominada “Marcha del silencio”, que se prevé sea multitudinaria comenzará a las 18 horas locales desde el Congreso argentino para finalizar en la Casa de Gobierno.
Hace un mes encontraron el cuerpo sin vida del fiscal Alberto #Nisman, quien investigaba el caso del Atentado a la Asociación Mutual Israelita Argentina (AMIA), ocurrido el 18 de julio de 1994, cuando una camioneta llena de explosivos estalló fuera del centro de la comunidad judía de Buenos Aires; dejando un saldo de 85 personas muertas y 300 heridas.
Después de años de investigar el caso, el fiscal Natalio Alberto Nisman (1963-2015) y Marcelo Martínez Burgos, acusaron formalmente al gobierno de Irán de planificar el atentado y a la organización libanesa extremista Hezbolá de ejecutarlo.
Nisman afirmaba que la presidente de Argentina, Cristina Fernández, y el canciller Héctor Timerman había realizado un pacto con Irán para proteger a los responsables; por lo que pedía que se les embargaran sus bienes por la suma de doscientos millones de pesos, por ser autores y cómplices del encubrimiento de los acusados iraníes, hecho calificado como crimen de lesa humanidad y genocidio.
El Gobierno argentino dice que no hay pruebas y que tienen argumentos para mostrar que el gobierno seguía exigiendo cuentas a Irán sobre este caso a pesar de los acercamientos económicos.
Sobre la muerte del fiscal, hay quienes suponen que lo asesinó el gobierno argentino para que no entregara las grabaciones, otros creen que fue un tercero para desestabilizar al gobierno argentino, o que podría ser algún extremista musulmán.
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