El 13 de agosto de 2021 se cumplen 500 años de la caída de Tenochtitlán, una fecha bastante… delicada en la historia nacional —por decirle de alguna manera. A manera de conmemoración se está construyendo una representación gigantesca del Templo Mayor en pleno Zócalo.
Y como todo lo que pasa en nuestro país, ya se está armando la polémica.
Si leíste acerca de los pleitos, viste la maqueta o simplemente quieres conocer qué está pasando con el Templo Mayor y la pirámide que están construyendo en el Zócalo, acá te contamos todo lo que necesitas saber.
Primero, ¿qué tranza con la maqueta?
La representación del Templo Mayor estará presente desde este 13 de agosto hasta el próximo 1º de septiembre.
Es una maqueta, sí, pero está gigante la canija. Tiene una altura aproximada de 16 metros y casi 675 metros cuadrados de superficie. Está construida, principalmente, con tubería para la estructura, con algunos materiales plásticos reciclados y detalles en fibra de vidrio.
Tiene una cobertura contra fuego, para evitar accidentes.
Se espera que, sobre la maqueta, se proyecte una narración que conmemore la fecha. “Se narrará el origen del pueblo mexica, su destino y la lucha por la Independencia y su consolidación como México independiente”, comentó José Alfonso Suárez del Real, de la Jefatura de Gobierno de la Ciudad de México, en una entrevista con El Universal.
¿Cuáles son las quejas contra la maqueta Templo Mayor?
La principal queja contra esta maqueta Templo Mayor es que, algunas personas han notado el completo abandono en el que se tiene al verdadero Templo Mayor.
Mientras se construye con tuberías una representación a escala, el verdadero sitio prehispánico se encuentra cerrado al público porque no han podido reparar los daños causados por las granizadas desde hace cerca de 4 meses. Van más de 100 días desde que se derrumbó la techumbre de La Casa de las Águilas… y no han terminado de arreglarlo.
Incluso el museo se encuentra cerrado al público.
El periodista Héctor De Mauleón recuerda —en su columna en El Universal— que el gobierno federal le ha recortado en casi un 75% el presupuesto al verdadero Templo Mayor.
Otras voces públicas no solo se enfocan en el abandono presupuestal, también han apuntado que no es precisamente necesario hacer esta clase de eventos cuando, a escasos metros, tienes el verdadero sitio histórico. Una de esas voces, es la del arqueólogo Eduardo Matos Moctezuma, fundador del Proyecto Templo Mayor y del Programa de Arqueología Urbana del Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH).
“Son como espectáculos que, a mi juicio, no vienen al caso, y es un gasto inútil, cuando debería invertirse en otras cosas”, comentó Matos Moctezuma.
Otros, a favor de la representación
Mientras se escuchan algunas quejas, en esta polémica hay quienes sí están a favor de que exista esta maquetota del Templo Mayor en el Zócalo.
Apuntan, en su mayoría, que se trata de diferentes presupuestos —el abandono del Templo Mayor es ‘culpa’ federal, la maqueta salió de la bolsa del gobierno de la Ciudad de México. Sin embargo, también hay voces que señalan el acercamiento cultural que existe por ponerla en una de las plazas públicas más importantes del país.
“Muchos mexicanos no tienen el tiempo o el dinero para invertir en libros o visitar museos,como consecuencia no tienen idea de cómo lucía. Ahora lo pueden ver”, comentaba el historiador Enrique Ortiz García en su cuenta de Twitter (@Cuauhtemoc_1521).
“¿Desde cuándo la cultura es una extravagancia?”, cuestionaba en un mensaje posterior.
En fin, ese es la polémica que se está armando por la maqueta gigante del Templo Mayor en el Zócalo de la Ciudad de México cuando faltan pocos días para que se conmemoren 500 años de la caída de Tenochtitlán, una fecha que busca reivindicarse como la resistencia indígena de los pueblos que, con los siglos, sentarían las bases de nuestro país.