No sé ustedes, pero a título personal, considero que ir a correr se ha convertido en el deporte con más crecimiento en los últimos años. No queremos decir que está de moda, ya que son muchos los que tienen como hábito religioso el salir y recorrer algunos kilómetros a determinada velocidad.
Sabemos de la existencia de grandes eventos como el Maratón de Londres, Nueva York, México y otras competencias de menor nivel y también somos conscientes de que hay un país que domina en esta disciplina. ¿Se han dado cuenta de que Kenia siempre aparece en el podio y en ocasiones haciendo el 1-2-3?
Aunque parezca una coincidencia, Kenia es claramente la potencia en lo que se refiere a competencia que involucren correr, principalmente distancias largas: 1,500 metros, 3,000, 5,000, 10,000, entre otras.
Así como Brasil es reconocido por su futbol, Kenia posee a los mejores corredores del mundo.
¿Y cómo es que un país de 582,650 km² tiene a los verdaderos especialistas de las distancias largas? De acuerdo con los científicos, esto podría tener ya una respuesta.
En el 2013, Wilson Kipsang ganó el Maratón de Berlín con un tiempo de 2 horas, 3 minutos y 23 segundos. Dos semanas después, Dennis Kimetto rompió el récord del Maratón de Chicago y sólo llevaba cuatro años corriendo de manera profesional y, atrás de él, tres compatriotas más.
¿Qué tienen en común?
Estos dos nombres propios y muchos más ganadores de maratones y carreras largas son parte del grupo étnico conocido como los Kalenjin (significa “te digo”). Ellos viven al occidente de Kenia, en el Valle del Rift; se estima que los Kalenjin alcanzan una población de tres millones, compuesta por tribus elgeyo, endorois, marakwet, nandi, pokot, sabaot, terik, tugen y kipsigis, esta última con la mayor población, 470.000 habitantes.
Esta tribu es la fábrica de los mejores corredores del mundo y de acuerdo con varios estudiosos, los Kalenjin nacieron y se hicieron para correr grandes distancias.
Varios antropólogos y científicos se han pasado años estudiando a esta tribu y han llegado a estas conclusiones:
- Viven la mayor parte del tiempo en altitudes por encima de los 2,000 metros sobre el nivel del mar, lo que les ha permitido desarrollar una mejor capacidad pulmonar.
- Su configuración física es muy delgada y eso les permite manejar con facilidad su peso corporal.
- El hecho de tener las piernas, tobillos y pantorrillas y delgadas les proporciona mayor eficiencia al correr y un menor gasto de energía.
- Los Kalenjin carecen de medios de transporte en sus aldeas, por lo que necesitan recorrer a pie cualquier distancia. Aprenden a desplazarse a altas velocidades desde la niñez, e incluso lo hacen aun si la distancia es corta.
Sólo para darles una idea de lo increíbles que son los kenianos/Kalenjin a la hora de correr, David Epstein, editor senior de Sports Illustrated expuso hace unos tres años:
Hay 17 estadounidenses que en la historia han corrido un maratón en 2 horas con 10 minutos. En octubre del 2011 hubo 32 Kalenjin que lo hicieron.
Ahí lo tienen mis estimados.
Obviamente el entrenamiento es todo para que un atleta se vuelva competitivo y esté en el selecto grupo de los mejores, pero los Kalenjin cuentan con la genética para decir que son “nacidos para correr”.