La revista británica NME reporta que los hijos de los Beatles están dispuestos a formar una banda. Parece que sólo era cuestión de tiempo, pero existe una muy buena probabilidad de que la respuesta a una de nuestras preguntas “¿Qué pasaría si…?” tendrá una respuesta positiva.
En una entrevista con la BBC, James McCartney (hijo de Paul y Linda) reveló que ya había discutido la posibilidad con Sean Lennon (hijo de John y Yoko Ono) y Dhani Harrison (hijo de George y Olivia), y ambos parecían mostrar entusiasmo por la idea de formar una “segunda generación” de los Beatles. El único que dijo que lo pensaría dos veces fue Zak Starkey (hijo de Ringo Starr y Maureen Starkey), baterista que ha tocado con Oasis y The Who. Pero que también existía la opción de pedirle a su hermano, James, que tocara la batería en su lugar.
Los Beatles es un grupo, o mejor dicho, una entidad que cuida mucho su legado. Ya se había reportado que Paul McCartney había discutido en varias ocasiones con sus ex-compañeros sobre la idea de re-integrar la banda. Pero al fin de al cabo, decidían que lo mejor era mantener su imagen intacta como “EL icono de los 60”. Si a sus hijos se les ocurre formar una banda, tendrían que tener en mente que son ellos los que deberán asumir las consecuencias y las críticas que seguro acompañarán un anuncio de tal magnitud.
¿Ustedes qué opinan? ¿Lo ven como un intento fácil de sacar dinero y aprovechar la rentabilidad del nombre de sus padres… o realmente se trata de un llamado artístico para comprobar si el talento colectivo corre en las venas?