En 2013 el fotógrafo inglés Charles Ommanney recibió el encargo de una revista alemana para ir a los Estados Unidos y fotografiar a personas normales con sus armas. Ommanney decidió hacer el encargo con un enfoque absolutamente doméstico, he aquí los resultados.
Lo más fácil, sin duda alguna, hubiera sido mostrar a personas hostiles o enojadas, mostrar fotos de accidentes o mal uso de las armas; pero eso no hubiera sido más que amarillismo. En contraste, decidió tomar a personas normales y apacibles dentro de sus casas.
Así cuenta Ommanney su historia:
“No puedo imaginarme ir por Inglaterra y tocar la puerta de alguien para decirle ‘Quisiera fotografiarlo con su escopeta’. Me verían como si yo fuera un lunático. Pero estas personas no encontraron de ninguna forma algo anormal en lo que yo quería hacer; sus armas son una perfecta extensión de sus vidas”
La cultura de las armas en los Estados Unidos es bastante particular. No se trata de un grupo de desadaptados sociales los que portan armas, sino personas normales, aparentemente inofensivas y que podrían ser nuestros vecinos. Las imágenes de Ommanney nos hace cuestionarnos acerca de lo que solemos pensar del tema, el cual es mucho más complejo de lo que podría pensarse. Quizá la imagen más poderosa es la del agente de Miami Loigrand De Angelis, que posa con su bebé a tan solo unos centímetros de su 9mm.
