Duras y llegadoras declaraciones ofreció el Papa Francisco durante la homilía del día de ayer.
El actual Sumo Pontífice será muy representante de la iglesia católica, pero no por eso es condescendiente con ciertas personas, ya que ayer recordó que el apóstol Juan decía que los corruptos “son el anticristo, están en medio de nosotros, pero no son de los nuestros”.
Por si nos está leyendo algún funcionario público y ya se está buscando la marca del 666, calma, el discurso del argentino fue de estricto carácter moral… aunque bien le podría quedar el saco a varios:
“¡Cuánto mal hacen los corruptos a la comunidad cristiana! Que el Señor nos libere de caer en ese camino de la corrupción”, exclamó el Papa.
Esperemos que con esta nota no nos comparen con el Semanario Desde la Fe, pero sin duda modificando un poquito lo dicho por el líder del Vaticano, sus declaraciones funcionan a varios niveles. Aquí un pequeño ejemplo:
“Todos somos gandallas pecadores. Nos conocemos desde dentro y sabemos qué cosa es un gandalla pecador. Y si alguno de nosotros no se siente así, que vaya y chi… a la consulta de un médico espiritual (…)¡Pecadores sí, corruptos no!”.