Mientras más avanzan los días, más crece mi admiración por la decadencia de Lindsay. Desteñida, con los ojos de borrego, deliciosamente vulgar, suculentamente traqueteada. Esa es la nueva Lindsay, al parecer la nueva mejor amiga de Terry Richardson.
Sólo me queda una pregunta ¿Parrandear con Lohan, será tan alucinante como dicen que era beber al lado de Amy Winehouse?