Una de las historias más importantes y polémicas de los últimos meses ha quedado resuelta. La Suprema Corte de Justicia (SCJN) decidió el caso de la muerte de Federico Gertz Manero, el hermano del fiscal Alejandro. Con una votación unánime decidieron absolver a Laura Morán y a su hija, Alejandra Cuevas, de cualquier presunta culpa.
Se retirarán las órdenes de aprehensión y Alejandra, que lleva más de un año en prisión, quedará libre de forma inmediata.
Esta decisión es un tremendo revés para Alejandro Gertz Manero, el titular de la Fiscalía General de la República (FGR), pues acusaba que ambas mujeres habían causado la muerte de su hermano al negarle cuidados.
Los argumentos de la SCJN retumbaron en la discusión unánime. Algunos ministros explicaron que no había pruebas del abandono de Laura Morán a su pareja, otros mencionaban que había llevado al hombre con especialistas e incluso, otros ministros más comentaban que no funcionaba con perspectiva de género asumir que Laura tendría la obligación de darle cuidados médicos.
Esa decisión, por su parte, terminó por liberar a su hija, Alejandra.
Si no había pruebas del delito de Laura Morán y su orden de aprehensión no tenía fundamento, Alejandra Cuevas tampoco habría cometido ningún delito.
Entonces, los ministros y ministras de la Suprema Corte decidieron que será liberada de forma inmediata después de haber pasado más un año en prisión, mientras el mediático caso impactaba en la imagen de Alejandro Gertz Manero, fiscal de la República, que impulsaba las acusaciones.
Ahora, con el caso cerrado y con la decisión tomada, la polémica llega a escritorios importantes.
Los ojos están puestos en la oficina de la Fiscalía General de la República (FGR) que impulsó las acusaciones de un caso personal, los miembros de la Fiscalía de la Ciudad de México que obtuvieron las órdenes de aprehensión sin las pruebas de los delitos y la jueza que —personalmente señalada por su cercanía con Gertz Manero— dictó prisión para las mujeres.