Durante la noche de ayer y madrugada de hoy, martes 2 de julio, el pleno del Senado aprobó en lo general y en lo particular la Ley Federal de Austeridad Republicana.

En general, esta ley verifica que los recursos públicos sean manejados con eficacia, eficiencia, economía, transparencia y honradez.  Todo el dinero ahorrado, menciona el artículo 61, será destinado al Ejecutivo para la aplicación de programas contemplados en el Plan de Desarrollo, o a donde el Presidente (AMLO) lo considere necesario.

Obviamente la oposición protestó por varios puntos de esta nueva medida y la denuncia de una “partida secreta para el Presidente” comenzó a escucharse cada vez más.

Pero ¿de que se trata esta mencionada partida secreta?

Justamente de este dinerito ahorrado.

Como lo mencionamos anteriormente, el artículo 61 de la Ley Federal de Austeridad dice:

“Los ahorros generados como resultado de la aplicación de dichas medidas deberán destinarse en los términos de las disposiciones generales aplicables a los programas del ejecutor del gasto que los genere. Por cuanto hace al Poder Ejecutivo, dichos ahorros se destinarán a los programas previstos en el Plan de Desarrollo o al destino que por decreto determine el titular

La partida secreta del Presidente es un guardadito o cierta cantidad de recursos prevista en el Presupuesto Federal de Egresos que el líder del Ejecutivo puede ocupar o destinar como mejor le parezca. Exacto, dinero que no está asignado a algún programa en específico y pueda ser usado sin control alguno.

Aunque esto ya estaba “eliminado”

El pasado mes de abril, la Cámara de Diputados aprobó por unanimidad que las partidas secretas fueran eliminadas del Presupuesto de Egresos de la Federación (PEF).

Antes de esta propuesta de modificación, la fracción IV del artículo 74 de la Constitución señalaba:

“No podrá haber otras partidas secretas, fueras de las que se consideren necesarias, con ese carácter, en el mismo presupuesto; las que emplearán los secretarios por acuerdo escrito del presidente de la República”.

Tras la propuesta, el artículo quedó en: “no podrá haber partidas secretas en el Presupuesto de Egresos de la Federación“.

Sin embargo, a pesar de que ya no se llaman así, sigue habiendo dinerillos que pueden ser usados a discreción del Presidente, como en el caso de los ahorros de la Ley de austeridad.

Y ¿qué dijo AMLO al respecto?

En conferencia de prensa mañanera, el presidente López Obrador explicó que esta facultad que tiene de decidir para dónde van a ir los recursos ahorrados la transferirá a la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP).

Esto para evitar “controversias”.

Con información de El Universal 

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