Inundaciones en Guerrero han causado graves problemas en infraestructura pública, Varios municipios permanecen incomunicados y en escasez de víveres. Las autoridades no responden adecuadamente.
La laguna de Tixtla, en Guerrero, se desbordó e inundó una tercera parte del municipio, afectando al menos a 30 mil personas, bloqueando el acceso por carretera federal al municipio y causando severos daños a viviendas. Los graves problemas de infraestructura no han sido atendidos aún por el ejecutivo de la república ni por el gobierno estatal.
Las aguas negras han cubierto al menos un tercio de Tixtla. La superficie se encuentra tapizada por algas y cadáveres de animales de granja. Los habitantes refieren que los desastres siempre han rebasado las capacidades (o disposiciones) de las autoridades. A los policías y guardia civil se les ve tan sólo en los albergues. El apoyo del gobierno de EPN se ha limitado únicamente a la instalación de tres albergues en la zona de Chilpancingo, dejando a su suerte los municipios aledaños. Los ciudadanos han comenzado a realizar labores comunitarias y exigen por lo menos “un medio de transporte, una lancha, para poder trasladarnos y traer vívieres a los hogares” que hasta ahora no les ha sido designada.
No sólo en Tixtla, sino también en Mochitlán, Quechultenango y en el propio Chilpancingo, los pobladores se quejan de que la ayuda no llega y que se concentra fuertemente tan sólo en el municipio de Acapulco. Afirman que hasta el momento no han recibido ni víveres y teléfono y luz no han sido restablecidos desde el domingo.
“Sólo vemos que pasan los helicópteros del Ejército, pero sólo van para Acapulco, aquí ni siquiera nos avientan una pinche bolsa de agua”, señala Flavio Aquino Hidalgo, uno de los afectados en vivienda y negocio.
Según la Jornada, existen especialistas que afirman que las autoridades subestimaron los posibles efectos de los huracanes, y no tomaron las medidas adecuadas, entre las que debieron figurar el impedimento de construcciones en orillas de ríos y lagunas y el reforzamiento de instalaciones eléctricas y de teléfonos.
Senadores de las tres principales fuerzas políticas, conscientes hasta ahora de su falta de previsión, anunciaron que propondrán hoy la creación de un Fondo Extraordinario para la Reconstrucción de los estados de Guerrero, Veracruz, Tamaulipas y Oaxaca, que contará al menos con 50 mil millones de pesos. Este dinero tendrá que ser utilizado para la reconstrucción de infraestructura pública y turística, así como para la creación empleos temporales.
La ayuda, sin embargo, parece llegar demasiado tarde: Rosario Robles, Secretaria de Desarrollo Social admite ya la escasez de alimentos, agua potable y medicamentos en la región. Volará el día de hoy con el fin de conocer a fondo las condiciones y llevar ayuda del gobierno federal. Especificó que la ayuda se dará a todo Guerrero y no sólo a Acapulco, e informó también del rescate de más de 1000 personas que con 10 helicópteros se ha llevado acabo.
A continuación te presentamos algunos videos que muestran algunos de los daños que Manuel e Ingrid han causado en territorio mexicano.
Vía: La Jornada, Reforma ,El Universal, Proceso
