Típico. Roban tu oficina y te quitan tus computadoras y otras pertenencias. Al otro día aparece todo lo que te habían hurtado y hasta una nota de disculpa. Típico.
Lo anterior no pertenece a un sketch cómico ni a un episodio de La Rosa de Guadalupe. Resulta que el pasado 31 de julio, un grupo de ladrones saqueó unas oficinas en el Condado de San Bernardino, en California. De acuerdo a reportes de la policía, los maleantes entraron por el techo cerca de las 10 de la noche y rápidamente se llevaron parte del equipo de computo.
Tras el robo, la policía acudió al lugar y comenzó una investigación. Lo que nadie se esperaba, era que al otro día, cerca de las 4:30 de la madrugada, Candy Stallings, directora ejecutiva de la oficina saqueada, recibiera una llamada de la policía en la que le informaron que todas las cosas robadas habían aparecido en un carrito de compras, frente a la puerta de la oficina.
Cuando uno de los investigadores se disponía a buscar rastros de huellas dactilares en una de las laptop devueltas, se topó con una nota donde los ladrones se disculpaban por lo que habían hecho e incluso hasta le mandaron bendiciones a Stallings.
¿Y eso?
Pues resulta que Stallings está al frente de una organización no lucrativa que ayuda a las víctimas de violencia sexual. Cuando los asaltantes descubrieron que habían saqueado a una organización benéfica, les remordió la conciencia y prefirieron devolver las cosas.
“Estamos todos conmocionados (…) Estaba incrédula, tenía escalofríos, me puse muy emocional”, dijo Stallings.
Los oficiales también se sorprendieron:
“Esta es la primera vez en mi carrera que veo que devuelvan los objetos robados”, dijo el teniente de la policía Paul Williams, quien hasta hizo una copia de la hoja para enmarcarla.
¿Ladrones decentes o simplemente rateros no tan malos?
De cualquier forma, lo importante es que esta asociación recuperó su material de trabajo.