Hoy se dio a conocer la sanción que recibieron los siete funcionarios de la Procuraduría Federal del Consumidor por las irregularidades cometidas con relación a la verificación practicada al Restaurante Maximo Bistrot.
En política nada es fortuito, es demasiada coincidencia que, desde que cortaron cabezas en la Profeco, casi automáticamente, la Procuraduría Federal del Consumidor decidió sancionar a McDonalds, Bimbo y Coca Cola, compañías que llevaba décadas operando de manera irregular.
Una de las aristas de la corrupción es el influyentismo, la gente que conoce o que tiene amigos o parientes en los altos cargos de la política y exige un trato privilegiado, pero la destitución de Humberto Benítez como titular de la Profeco y la sanción de siete funcionarios, fue un precedente para castigar los actos de prepotencia y las irregularidades.
Representa una muestra de una sociedad civil que se organiza cada vez más en las redes sociales, hay un reclamo frente a una clase política que hace ya mucho tiempo sigue teniendo esta actitud de que ellos son superiores
Los funcionarios más afectados fueron el subprocurador de Verificación, el director general de Verificación y Vigilancia y el jefe de departamento de Verificación de Normas Oficiales Mexicanas, a quienes se les sancionó con la destitución del cargo e inhabilitación temporal para desempeñar empleos, cargos o comisiones en el servicio público por un año. El Director de Procedimientos y Sanciones fue destituido de su cargo mientras que 3 inspectores de Programas Especiales, comisionados como Verificadores, fueron suspendidos de sus empleos por un periodo de 6 meses.
Suponer que el cambio de servidores públicos dio como resultado eficiencia en la Profeco es una opción, le dejaremos a Alfredo Castillo (el nuevo titular de la Profeco) el beneficio de la duda, pero la experiencia histórica de nuestra burocracia nos demuestra que eso no ocurre, así, otra de las opciones es que la Profeco está buscando legitimarse como institución, haciendo bien lo que tendría que hacer, trabajar por los derechos del consumidor.
