De acuerdo con la Organización de Naciones Unidas, la baja en homicidios dolosos vinculados con el crímen organizado puede no ser mérito del gobierno mexicano, sino, más bien, puede ser una muestra de la hegemonía de un grupo delictivo sobre otros.
Así lo advirtió el representante en México de la Oficina del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos, Javier Hernández, después de que se haya anunciado por parte del gobierno un decremento en materia de homicidios relacionados con el Narco.
«Una de las alertas que los involucrados en las instituciones de seguridad pública están haciendo es que, en algunas regiones, la consolidación de un grupo del crimen organizado, es decir, su hegemonía ante otros grupos que se disputan la plaza , lleva al cese de la conflictividad, y eso explica también la reducción de muertes violentas».
Es decir, más que positiva, la disminución de homicidios puede mostrar el preocupante nivel de influencia y permeabilidad que tiene un grupo sobre una determinada región (es decir un control sin disputa ya). Así mismo, se dijo que no podían ser fruto de las políticas de la nueva administración, ya que éstas todavía no están maduras:
«Pero todos sabemos que los recursos para esas políticas públicas sociales , los aparatos e instituciones para su implementación, la participación ciudadana en las mismas, los mecanismos de control de la asignación de fondos aún no están maduros y establecidos plenamente. Y también sabemos que la Gendarmería aún es un proyecto en discusión, entonces lo que las cifras prueban o no prueban no está hoy necesariamente vinculado a los procesos de las nuevas políticas».