El pasado 22 de mayo, el entonces director del ISSSTE, Sebastián Lerdo de Tejada falleció en el hospital regional Adolfo López Mateos, de dicha institución, a causa de un infarto al miocardio.
En su momento, el propio ISSSTE informó que se realizaron todos los esfuerzos y maniobras de reanimación posibles, con tal de salvar la vida del entonces funcionario, quién sería pronunciado muerto a las 10 de la noche con 56 minutos.
Sin embargo, El Universal ha dado a conocer un video, tomado por las cámaras del circuito cerrado del hospital, en donde se evidencia la negligencia de la que fue víctima el director general del instituto, quién de entrada, no recibió atención alguna por parte de algún doctor del hospital, y no sólo eso, sino que pasó hasta 23 segundos sin recibir auxilios médicos, tiempos que de acuerdo a cardiólogos, puede ser de vital importancia cuando se está sufriendo un infarto.
El video de dos minutos de duración, muestra la llegada de Lerdo de Tejada al Hospital López Mateos, donde es atendido abordo de una camilla por paramédicos, quienes intentan dar masaje al corazón del funcionario, hasta que una llanta de la camilla se descompone. Ahí todos dejan de atender al paciente para arreglar la rueda, dejándolo sin auxilio alguno durante más de 23 segundos, y posteriormente es trasladado a una sala que no es precisamente la de choque, ni tampoco se observa que en algún momento se le trate de auxiliar con la ayuda de algún desfribilador.
Desgraciadamente, Lerdo de Tejada falleció a los 48 años de edad, en circunstancias que tristemente se repiten diariamente no sólo en el ISSSTE si no también en el Seguro Social y demás instancias de salud pública en nuestro país, donde la negligencia médica, ya sea por incapacidad, burocracia o la ausencia de equipo de trabajo en buenas condiciones, cuesta la vida de muchas personas.
Ante la publicación de este video, el ISSSTE ha emitido un comunicado en donde afirma que “responde a protocolos generales de atención. El seguimiento de los mismos es de cumplimiento obligado por quienes están involucrados” antes de anunciar que se abrirá una investigación sobre el trato dado a Lerdo de Tejada, investigación que podemos adelantar, terminará con la suspensión de los empleados involucrados, más no con un cambio o mejora en su sistema de atención.
A final del día, no deja de ser una ironía que el Director del ISSSTE haya perdido la vida por la paupérrima atención recibida en uno de los “mejores” hospitales del ISSSTE. Desgraciadamente, la familia de Lerdo de Tejada no es la única que le ha tocado sufrir el desprecio, maltrato y negligencia médica con la que se suele atender a los pacientes de este país; lo que debería obligar al ISSSTE y a todas las instancias de salud pública a replantear sus servicios y protocolos, así como al propio gobierno priorizar en la atención que se da a la seguridad social de sus ciudadanos.