Desde que se supo que Brasil sería la sede del Mundial, el pubelo brasileño no lo vio con buenos ojos. Luego, con la Copa Confederaciones, las personas salieron a manifestarse por los altas cifras que se invertirían en estadios y futbol pero no en educación y salud.
La gota que derramó el vaso fue el accidente que se dio en la Arena de Corinthians, el estadio que albergará el partido inicial de la Copa del Mundo. Muchos brasileños se han expresado en contra de la FIFA, diciendo que todo el dinero se lo llevarán ellos y nada quedará para el país.
Ahora, una Organización No Gubernamental de Brasil nominó a la FIFA a los Public Eye Awards o como se les conoce coloquialmente “los Nobel de la vergüenza”. Estos se llevan a cabo desde el año 2000, en contraposición al encuentro anual del Foro Económico Mundial (WEF) en Davos. Los Public Eye Awards galardona a aquellas empresas, que no muestran una responsabilidad para con el hombre y el medio ambiente.
La Coordinación Nacional de los Comité populares de la Copa (ANCOP), una red de movimientos sociales fue quien postuló a la FIFA, quien este jueves llegó a los 6.443 votos, de los cuales 3.551 son de Brasil. Parcialmente estaba en segundo lugar, detrás de la petrolera rusa Gazprom -con más de 15.590-, denunciada por la explotación petrolera en el Ártico.
El “Nobel de la vergüenza” es coordinado por las organizaciones Greenpeace y Declaración de Berna.
Además de la FIFA y Gazprom, están nominados el banco HSBC, la cadena de tiendas de ropa Gap y el fabricante de pesticidas Syngenta. En 2012, Vale fue electa por el público para recibir el título, basado en denuncias de violaciones de los derechos humanos y daños ambientales por sus actividades.
Pues ahí lo tienes, FIFA. En Brasil ya no eres bien vista y se te complicará mucho que el Mundial se realice como tu lo tienes en mente. Por otro lado, es el Mundial de futbol: un evento que podría darle un empleo (temporal) a muchos y provocar una derrama económica para el país.
Aunque de ideales ni utopías viven los países…