No salimos de una crisis cuando entramos en otra. Sentimos darles esta noticia pero el panorama financiero a nivel mundial no es nada alentador (igual y ya se dieron cuenta al abrir sus carteras). Según un informe de la Conferencia de Naciones Unidas para el Comercio y el Desarrollo (UNCTAD) la economía mundial está a punto de caer en una nueva recesión.
‘Situación y Perspectiva de la Economía Mundial’ es el título de este informe que nos dice que “la economía mundial está tambaleándose y al borde de una nueva recesión. Se espera un crecimiento anémico durante 2012 y 2013. Los problemas que amenazan la economía mundial son múltiples e interconectados. Los mayores desafíos son luchar contra la crisis de los empleos y el declive de las perspectivas de crecimiento, especialmente en el mundo desarrollado”.
Este documento (que parece guión de película de terror) señala al desempleo como el “talón de Aquiles” que impide que se dé la recuperación económica de los países desarrollados. La UNCTAD prevé un déficit en los empleos a nivel mundial de 71 millones, de los cuales 17 millones corresponderían a los países ricos. Imaginen la gravedad del asunto, si tan sólo en el 2011 el desempleo en los jóvenes alcanzó el 18% .
Y ahí les va otra noticia triste, obscura, depresiva y para ponernos de malas: según el texto si la situación no mejora sustancialmente, los porcentajes de desempleo no volverán a su normalidad ¡sino hasta después del 2015!
Los autores explicaron que es muy probable que las medidas tomadas por los países europeos para detener la crisis no serán suficientemente efectivas, y que las acciones de austeridad fiscal emprendidas por EE.UU. llevarán a ese país a la temida recesión. Por eso sugieren que se tomen medidas más agresivas.
Pues igual y en el 2012 no se acaba el mundo, pero parece que nos irá como en feria. Aquí está la ecuación maldita de lo que necesitamos para que nos cargue el payaso:
“Una recesión en Europa o en Estados Unidos puede no ser suficiente para inducir una recesión global, pero el colapso de ambas economías seguramente sí que lo haría”.
Entonces ¿qué sugiere este informe que hasta ahora sólo ha servido para preocuparnos? Pues que “los países desarrollados deberían ser muy cautos en no embarcarse prematuramente en políticas de austeridad fiscal, dado el todavía frágil estado de la recuperación y los elevados niveles de desempleo”.
¿Y nosotros los pobres (países en desarrollo)? Pues nos aconsejan evitar que los siempre volátiles precios de las materias primas aumenten.
¡Cosa de nada!
Para finalizar de una forma no tan apocalíptica, en el informe se pronostica un crecimiento de 3.3% para América Latina (quisiéramos que fuera más, pero para como están las cosas ‘algo es algo’), 8.7 para China y un 7.7 para la India.
Por lo menos ya sabemos a donde mudarnos: ¡India, allá te voy!
¿Qué tal el panorama? Esperemos nuestra endeble pero heroica economía mexicana resista este temible embate.
Ahora, después de amargarles la tarde, los invitamos a leer cualquier otra nota vaciladora de Sopitas.com y recuperar la sonrisa… antes de que llegue la recesión.
