Duffy es un perrito de ochos años que a causa de la diabetes fue perdiendo la vista hasta que quedó completamente ciego. De ser un perro alegre, pasó a ser un perro que chocaba con todo.
Para recuperar su vista, los dueños de Duffy lo sometieron a una operación pues ya no era feliz:
“Era muy doloroso ver cómo no reconocía a nadie y no paraba de hacerse daño porque chocaba con todo”.
Al finalizar la operación y recuperarse un poco, Duffy se reencontró con sus dueños y no pudo ocultar su emoción al observarlos de nuevo. Aquí el video que ya tiene más de 600 mil visitas en YouTube:
No estoy llorando, se me metió un Duffy en los ojos 🙂 .