Ubicada en la provincia de Yongin, una de las ciudades que han tenido un crecimiento abrupto a partir del siglo XXI, la casa fue construida y diseñada por el innovador despacho Moon Hoon. Su construcción tardó aproximadamente 6 meses y (según Moon Hoon) está inspirada en el diseño de los sandcrawlers, aquellas grandes naves que aparecen en Star Wars: Episodio IV (A New Hope), justo en las que se transportan los jawas y llevan a R2D2 y C3PO a la granja de los Skywalker.
Mide poco más de 10 metros de altura y ocupa un área de 50 metros cuadrados. Su costo aproximado es de $192,000 dls. ($200 millones de wons surcoreanos). Tiene tres habitaciones, un baño, sala-comedor e incluso una habitación secreta, todo dispuesto entre los tres pisos de construcción. Su estructura está hecha con madera y concreto y sus acabados interiores son de distintos tipos de maderas.
Independientemente de que efectivamente parezca o no un diseño de Star Wars, el despacho asegura que la casa tiene todas las necesidades y características necesarias para satisfacer a los fans más estrictos. Según el la gente de Moon Hoon el último piso “podría ser un cuarto de control para un futuro Darth Vader o un Jedi”.
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