Recientemente, por medio de redes sociales, se difundió el video de una fiesta que se llevó a cabo al interior de un kínder en Tonalá, estado de Jalisco.
Resulta que todo ocurrió el 12 de diciembre pasado en la colonia Loma Dorada, en el jardín de niños Melanie Kelin. De acuerdo con lo que se puede ver en el video, en la fiesta estuvieron más o menos 25 invitados y no se alcanza a distinguir que traigan cubrebocas o que guarden la distancia entre ellos, ambiente propicio para los contagios de COVID-19.
Todo esto pasó a pesar de la pandemia de COVID-19 a la que nos enfrentamos y a la necesidad de evitar reuniones y fiestas para cortar la cadena de contagios.
Clausuraron el kínder por la fiesta
Derivado de esta denuncia y un día después de la fiesta, el ayuntamiento de Tonalá informó que el kínder estaba funcionando como un salón de eventos. Es por eso que al acudir a una inspección clausuraron el lugar debido a que la licencia de funcionamiento era para un recinto educativo, no para un salón de fiestas.
Además la evidencia presentada en video demuestra que los asistentes y organizadores estaban infringiendo los protocolos de salud al hacer una fiesta.
De acuerdo con Telediario Guadalajara, a pesar de que el lugar fue clausurado por la fiesta clandestina y en la entrada se colocaron los correspondientes sellos, en la mañana del 14 de diciembre los accesos ya estaban libres y no había rastro de los sellos.
Sin embargo, al interior del lugar podían verse las evidencias de la fiesta: confeti y tiras de papel por todos lados.
Hasta el 13 de diciembre en Jalisco había un total de 124 mil 661 casos confirmados acumulados de COVID-19 por el programa Radar Jalisco y 5 mil 157 lamentables defunciones.
