¿Están sentados? Prepárense para una importantísima noticia. Sí, sabemos que no podían dormir del suspenso que les ocasiona la actual situación administrativa de Kazajistán, pero ya que están aquí les contamos que, este miércoles, el país de Asia Central le cambió el nombre a su capital. Curiosamente, el nuevo nombre de la capital de Kazajistán es en honor a su más reciente —y único— expresidente.
Si eres de los que tenían súper presente que la capital de Kazajistán es Astaná, pues es momento de que cambies el chip y actualices, aunque sea con plumón, tu polvoso juego de Maratón: el nuevo nombre es Nursultán.
—Wikipediazo en 3… 2… 1…—
Este martes, 19 de marzo, el eterno presidente, Nursultan Nazarbayev, renunció a su puesto como mandatario después de casi 30 años de estar al frente del país. El señor Nazarbayev ocupaba el cargo desde que Kazajistán se declaró independiente en 1991.
Un día después, el miércoles, el nuevo presidente, Kassym-Jomart Tokayev, tomó protesta. Su primer acto de gobierno fue bautizar a la bellísima capital del país en honor al histórico mandatario.
Renuncia de Nursultán Nazarbayev: así es Astaná, la faraónica capital que se convirtió en el símbolo de los 30 años en el poder del único presidente de Kazajistán https://t.co/YM2F5L5Tjv
— BBC News Mundo (@bbcmundo) 20 de marzo de 2019
La verdad es que el cambio de nombre ya le urgía a la ciudad: Astaná significa —en el Kazajo original— literalmente “capital”. Además, no es como que tenía un grandísimo arraigo histórico con su población. Hasta 1998, esa misma ciudad se llamaba Akmolá.