Esos besos de tres tendrán que esperar… digo, ¡¿qué?! A todos y todas ya nos urge que se encuentre la cura contra el coronavirus, pues aunque la ‘nueva normalidad’ ha traído de vuelta algunas actividades pausadas durante los últimos meses, la mera verdad es que a muchos (sobre todo a los jóvenes) nos cuesta acostumbrarnos.
Con la existencia del COVID-19 uno no puede salir a fiestas o antros sin el temor de contagiarse (bueno, hay quienes sí, pero esa es otra historia). Razón por la que nos emociona saber que ya hay varias vacunas en desarrollo. Sin embargo, quizá no deberíamos hacernos tantas ilusiones, pues muchos quizá tendremos que esperar hasta el 2022 para poder recibir una vacuna contra el coronavirus.
Los jóvenes podrían esperar más tiempo para recibir una vacuna
No es por ser mala onda, en realidad así lo dio a conocer recientemente la doctora Soumya Swaminathan, jefa científica de la OMS, quien informó recientemente sobre la posibilidad de que los jóvenes esperen más tiempo para poder vacunarse contra el coronavirus.
Esto será porque las dosis en el mundo serán limitadas y por ende, deberán priorizarse para los sectores vulnerables. Dicho esto, trabajadores de la salud que se encuentran en la primera línea de batalla, así como adultos mayores, tendrán acceso temprano a la vacuna. Esto de acuerdo al plan de priorización que elaborará la Organización Mundial de la Salud.
“La mayoría de la gente está de acuerdo en que se comience con los trabajadores de la salud, pero incluso entonces es necesario definir cuáles de ellos están en mayor riesgo. Luego los ancianos, etc”, mencionó recientemente Soumya Swaminathan, de acuerdo con el portal CNBC. “Habrá mucha orientación, pero creo que una persona promedio, una persona joven sana, podría tener que esperar hasta 2022 para recibir una vacuna”.
No se pueden producir tantas vacunas en poco tiempo para cubrir la demanda
La científica detalló que si bien en la actualidad existen varias vacunas en desarrollo, será hasta el 2021 cuando el mundo pueda tener lista una dosis que sea segura para los demás y además, cuente con resultados a largo plazo. Aunque eso sí, el camino para ello aún es largo.
“La gente piensa que el 1 de enero habrá una vacuna y que las cosas volverán a la normalidad, pero las cosas no serán así. Nadie jamás ha producido vacunas en los volúmenes que se necesitarán, así que en 2021 esperamos tener vacunas, pero en una cantidad limitada”, mencionó Soumya Swaminathan.
