¿Se les hacía raro que los partidos dejaran que les quitaran lana sin chistar? A muchos, pero no se preocupen, las cosas vuelven a la normalidad y, luego de darse cuenta que votaron a lo güey hace unas semanas, los del Partido Verde Ecologista reaccionan. Dicen que siempre no están de acuerdo con la reforma electoral que les reducirá significativamente sus fondos: la conocida ley #SinVotoNoHayDinero.
La acción de inconstitucionalidad en contra de la reforma promovida por el diputado independiente Pedro Kumamoto fue aceptada por la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN), por lo cual emplazó a los poderes Ejecutivo y Legislativo locales para que den un informe sobre la reforma, esto en un plazo máximo a seis días. Además, el Congreso tapatío tendrá que enviar todos los antecedentes legislativos del decreto impugnado, incluyendo iniciativas, dictámenes, actas de las sesiones y constancia de las votaciones de los integrantes del órgano legislativo. Por otra parte, se pedirá a la Presidenta de la Sala Superior del Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación que diga -por escrito- qué opina respecto a la acción emprendida por los del PVEM.
¿Se echaron para atrás?
Pues no, el pasado 1 de junio (cuando se aprobó la reforma a la ley electoral) los tres diputados del Verde que están en el Congreso de Jalisco estuvieron en contra de lo propuesto por Kumamoto. Al final, el #SinVotoNoHayDinero fue aprobado con 31 votos a favor, cinco en contra y dos abstenciones. Los otros dos legisladores que no estuvieron de acuerdo con que les mocharan a sus ingresos partidarios fueron los perredistas Saúl Galindo y Mónica López Almeida.
Lo que señalan los del partido del tucán es que los diputados de Jalisco invadieron atribuciones del Congreso de la Unión, así que solicitan la invalidez de la reforma aprobada, la cual establece que “el financiamiento a los partidos políticos nacionales en años no electorales se fijará multiplicando el número de electores registrados en el padrón por el 20% del valor de la Unidad de Medida y Actualización (UMA)”… lo cual no luce tan mal, pero lo mero bueno está en años electorales, cuando el valor de la UMA se multiplique por el total de votos válidos obtenidos. Esto seguramente condena a los del PVEM a no sacar pa’l gasto y siempre estar atenidos a coaliciones… momento, ¿qué no es eso lo que siempre han hecho? Bueno, entonces a que los partidos con los que unan fuerzas los mangoneen de forma más manchada.
Para que la reforma -la cual se espera entre en acción en 2019- sea anulada, será necesario que al menos ocho de los 11 ministros voten a favor de la acción de inconstitucionalidad.
