Esta semana falleció una estudiante del Instituto Tecnológico Autónomo de México (ITAM). Una joven alumna de la Licenciatura en Derecho y Relaciones Internacionales perdió la vida y la comunidad universitaria se movilizó ante la dolorosa pérdida. En redes sociales, abrieron la conversación por la falta de atención a la salud mental y los altos niveles de estrés por la exigencia académica dentro de la institución.
“Conozco más gente en el ITAM que se quiere suicidar, que gente que quiere tener hijos”, escribió una estudiante en sus redes sociales.
La exigencia es tal, que la conversación en Twitter alcanzó los niveles más altos de las tendencias en México y se desarrolló el hashtag #ITAMDateCuenta. Uno de los puntos más fuertes del reclamo en redes sociales es que hace unas semanas y en semestres anteriores se han visto casos similares.
En parte, los estudiantes señalan la ansiedad provocada por los exámenes y las exigencias académicas que, aseguran, llegan a ser desmedidas.
Aunque el ITAM compartió el obituario en redes sociales y recordaron que tienen una línea de apoyo en servicio de sus alumnos, el reclamo en redes sociales abrió la conversación por el poco interés que han demostrado por la salud mental.
Obituario pic.twitter.com/2o06xGMmOT
— ITAM (@ITAM_mx) December 12, 2019
¿Y los reclamos? Son de todo tipo, pero aquí contamos algunos ejemplos.
Ayer por la noche una estudiante del @ITAM_mx se suicidó. No es aislado, parece que varios más intentaron acabar con su vida en los últimos meses. Es urgente que tomen en serio la salud mental de sus estudiantes. Sus medidas son insuficientes.
— Brianda Romero (@Brianda_rc) December 12, 2019
Los estudiantes y miembros de la comunidad aseguran que al interior del ITAM se promueve que los alumnos no tengan vida fuera de la academia y que no hay espacios deportivo suficientes. También reclaman la falta de lugares de esparcimiento y la nula atención psicológica. “Es inaudito el culto al estrés, la poetización de la violencia psicológica y la sistemática necesidad de hacernos sentir mediocres, insuficientes y limitados”, escribió otro usuario de redes sociales.
Mientras algunos ponían capturas de pantalla de las fallas en los sistemas de apoyo, otros recomendaban (y pedían) poner la salud mental en el lugar que se merece.
Una alumna del ITAM se suicidó.
A nuestra universidad le falta una formación integral y responsable:
-Promueve (sí, promueve) que los alumnos no tengan vida fuera de la académica/profesional.
-Los espacios deportivos son mínimos.
-No tiene ni un solo psicólogo de planta.— Miguel Alfonso Meza (@MiguelMezaC) December 12, 2019
“Quiero graduarme del ITAM, pero también me gustaría no ver a mis amigos llorar, deprimirse, meterse cosas y demás en épocas de finales”, sentenciaron.