Después de lo revelado en los documentos llamados “Los Papeles de Panamá”, muchas figuras políticas se han visto en serios problemas. Pero nadie como Sigmundur David Gunnlaugsson, Primer Ministro de Islandia, quien se enfrenta ante la furia de su pueblo.
Pretty much all of Iceland demanding Prime Minister’s resignation #panamapapers pic.twitter.com/7P674uMwxI RT zaibatsu
— TheStudentDebtGuy (@StudentDebtGuy) April 4, 2016
Weird I was there a week ago. Would’ve been cool to see. “Thousands Protest In Iceland” https://t.co/mhYY9ZPLjX
— Jacob Walp (@walp_jacob) April 4, 2016
Iceland today pic.twitter.com/6J5Cu2zKyW
— Ingibjorg Reynisdott (@IngibjorgReynis) April 4, 2016
De acuerdo con esta investigación, Gunnlaugsson y su esposa, Anna Sigurlaug Palsdottir, compraron la empresa Wintris al despacho de abogados panameños, Mossack Fonseca en el año 2007. Gunnlaugsson, tenía invertidos millones de dólares en dinero heredado de su esposa, los cuales nunca dio a conocer cuando entro al Parlamento en el año 2009.
Según Gunnlaugsson, las reglas del Parlamento solo lo obligan a declarar los bienes obtenidos por actividades comerciales, mientras que lo que él hacía, era simplemente guardar el dinero de su esposa. Además, que en una entrevista para The Guardian, el Primer Ministro se retiró cuando se le hizo preguntas sobre Wintris:
The moment Iceland’s prime minister walked out of an interview because of a tax haven question #panamapapershttps://t.co/FfWj8jiQec
— The Guardian (@guardian) April 4, 2016
Para el infortunio de Gunnlaugsson, estas declaraciones no han afectado para nada a las más de 5 mil personas que salieron a exigir la renuncia del Ministro:
Video shared by @w03_ shows protest in Iceland over #panamapapers pic.twitter.com/fi7StdRSW4
— Sara Yasin (@missyasin) April 4, 2016
Outside Parliament now! #panamapapers #Iceland pic.twitter.com/1V90gwtXC6
— Sigridur Tulinius (@sigridurtul) April 4, 2016
Para entender la inconformidad del pueblo islandés, hay que recordar que en el 2008, Islandia sufrió una de sus peores crisis económicas y el recuerdo aún permanece fresco. Las acciones de Gunnlaugsson en el año 2009, reflejan el poco interés que este hombre tuvo sobre la situación de su pueblo, evadiendo millones en impuestos.
Para nosotros, 5 mil personas manifestándose es muy poco, pero si tenemos en cuenta que la población de Islandia, comprende alrededor de 330 mil personas, podemos ver la magnitud de estas acciones. Si tan solo, nosotros nos llegáramos a unir de esta manera.