Una pequeña isla en Portugal se ha convertido en el nuevo foco de la comunidad científica y es que —guiándonos por el fin de semana que pasaron—, se esperan cosas preocupantes. No hablamos de un Kaiju, ni de la esperada llegada de Godzilla, pero todo el mundo está sacado de onda pues en menos de 2 días llevan más de mil 300 sismos.
El alcalde decretó una “crisis sísmica” y comienzan las preparaciones para una emergencia.
Siendo completamente honestos —y con cierta naturalidad mexicana— los sismos no han sido nada extremo. El más fuerte de los mil terremotos apenas pasó de 3.3 de magnitud. Sin embargo, puede ser señal de que algo preocupante se cocina en Portugal.
Resulta que todas estas sacudidas han sucedido en la Isla San Jorge. Si no la conocen, no se sorprendan, pues es apenas una pequeña comunidad con menos de 8 mil habitantes que forma parte de las escondidas Islas Azores, un archipiélago portugués en medio del Atlántico. ¿Por qué son importantes? Porque están justo encima de una zona sísmica llamada fisura volcánica de Manadas.
La zona tiene una larga historia de sacudidas tectónicas, pero los volcanes no han hecho erupción en más de 200 años… y pues, el mundo se está poniendo nervioso.
En la historia reciente seguro recuerdan que un enjambre sísmico —nombre oficial de estas sacudidas constantes— se presentó también en España, el año pasado, cuando días después hizo erupción el volcán La Palma. Una erupción que duró más de 80 días y en el camino provocó una serie de destrozos. También unas imágenes espectaculares de la brutalidad de nuestro planeta.
A las autoridades les preocupa que algo similar se esté cocinando en las Islas Azores de Portugal.
Frente a eso, reporte Reuters, el gobierno local decretó un estado de emergencia por la “crisis sísmica” que les ha arruinado la semana. Aunque no quieren declarar alerta, sí están preparando planes de evacuación y han enviado equipos científicos a medir las sacudidas y la posibilidad de una explosión volcánica.
