Debido a lo que representa, el diablo ha sido un personaje recurrente a lo largo de la historia del cine, ya sea que se haga referencia a él de alguna forma o que intervenga directamente en la trama.
El diablo ha estado presente en el cine desde sus inicios, con diferentes nombres, haciendo de las suyas en muchas películas en las que se le ha representado de múltiples maneras que van desde un tipo rudo, un cínico, una mujer sexy, la versión animada, la icónica imagen en la que se le presenta en color rojo y con cuernos, o alguna otra que se le ocurra al director.
Son muchos los diablos que hemos visto en el cine y es algo complicado definir cuáles son los mejores; sin embargo, decidimos compartir con ustedes una lista con 10 de aquellos que más nos han gustado.
Tenacious D in the Pick of Destiny.
Comencemos con la imagen clásica del diablo, aquella en la que se le presenta como un ser de gran tamaño, con unos cuernos largos y retorcidos, de color rojo, con colmillos filosos y patas de cabra; justo así aparece en esta cinta, en la que además muestra una mala actitud, hace referencia a su lado más perverso y sádico, se la pasa diciendo blasfemias y demuestra sus habilidades en diferentes instrumentos musicales para confirmar que el rock es cosa del diablo.
El encargado de interpretar a satanás en Tenacius D in the Pick of Destiny es Dave Grohl, el ajonjolí de todos los moles, quien fue caracterizado de la mejor manera posible y sacó su lado diabólico para regalarnos una gran actuación.
Legend.
Siguiendo con la imagen anterior, otro buen ejemplo es La Oscuridad, nombre con el que se presenta al diablo en esta película dirigida por Ridley Scott. El actor Tim Curry fue transformado en un enorme ser diabólico que es capaz de causarle miedo a más de uno sólo con su imponente presencia.
El buen trabajo hecho por los encargados de maquillaje es digno de reconocimiento, tal es así que se le nominó a los Premios Oscar en dicha categoría. Este diablo no sobresale sólo por su apariencia, también lo hace por su personalidad y por ser mostrado como un ser débil que cae ante la tentaciones que se le presentan.
El día de la bestia.
Álex de la Iglesia presenta a un diablo con aspecto de macho cabrío, que anda sobre 2 patas y con una mirada de lo más inquietante; su aparición es gloriosa y desata la maldad con su sola presencia. Aunque el maligno sale poco tiempo, es más que suficiente para deleitarnos con su presencia.
En esta comedia satánica, un sacerdote descubre la fecha en la que nacerá el anticristo y decide buscar el lugar en el que pasará, para lo cual se une a un fan del death metal.
The Lords of Salem.
Alejándonos un poco de la imagen imponente con cuernos y todo lo demás con la que es fácil identificar al diablo, encontramos otra representación de él, bastante podrida y llena de maldad, en la última película de Rob Zombie.
Tres brujas invocan al maligno y éste se hace presente en distintas formas, por ejemplo, como un ser grotesco que no tiene un gran tamaño, pero sí luce lo suficientemente aterrador para provocar varias pesadillas.
Bedazzled.
Otra forma en la que se ha representado recurrentemente al señor de las tinieblas es como una persona, ya sea que se trate de una mujer o de un hombre. El caso de la diabólica figura femenina lo tenemos en Bedazzled.
La bella Elizabeth Hurley hace uso de toda su seducción para interpretar a un diablo al que ningún hombre, y una que otra mujer, le diría que no. La principal arma de este personaje, además de su apariencia física, es su capacidad de engañar a los demás sin que se den cuenta.
Y si el diablo realmente es así, pues a mí que me lleve el diablo ya.
The Devil’s Advocate.
Aquí el diablo es John Milton, un hombre sumamente exitoso y carismático, que es el CEO de una de las firmas de abogados más importantes que existen, cuyo centro de operaciones se encuentra en Nueva York.
Para muchos fue muy atinado presentar al diablo como un hombre poderoso que se desarrolla en el mundo de los negocios y las leyes, el encargado de interpretarlo fue Al Pacino, quien ofrece una de sus mejores actuaciones, dándole un toque muy suyo y algo cínico al personaje.
Beat the Devil.
En este cortometraje dirigido por Tony Scott, el talentoso Gary Oldman hace el papel del diablo, al que vemos como un tipo con apariencia de rockstar, extravagante, bastante desequilibrado, despreocupado, con una personalidad explosiva y acostumbrado a salirse con la suya.
El diablo recibe la inesperada visita de James Brown, quien quiere renegociar “su contrato” y lo desafía a una carrera de autos en la que cada uno será apoyado por su chofer, lo que sirve para que también nos demos cuenta del espíritu competitivo del príncipe de las tinieblas y de cómo es negociar con él.
Angel Heart.
Esta cinta tiene una de las mejores representaciones del diablo que nos ha dado el cine, la cual estuvo a cargo de Robert De Niro, actor que, al igual que su colega Al Pacino en The Devil’s Advocate, le aporta algo de su propia personalidad al personaje.
El maligno se llama Louis Cyphre y su pronunciación correcta es “Lui-Zaifer”, que viene siendo lo mismo que Lucifer. Se trata de un tipo de apariencia común que puede ser muy siniestro.
Constantine.
Justo en el momento en el que John Constantine está a punto de morir, “Lu” se aparece con los pies llenos de brea y una actitud sombría, entusiasta debido a que está cerca de conseguir un alma que ha deseado desde hace mucho tiempo.
El lucifer de Constantine está enojado, es poderoso y engreído; no le hacen falta los cuernos ni la apariencia demoníaca para inspirar miedo, no da mucho miedo a primera vista. De una manera sencilla y sin caer en exageraciones, el actor Peter Stormare hace a un gran Lu.
The Prophecy.
Años antes de interpretar a uno de los personajes más importantes de la trilogía de The Lord of the Rings, Viggo Mortensen le dio vida al mismísimo lucifer, y lo hizo muy bien. En medio de una guerra que se da entre ángeles, lucifer hace acto de presencia, cantando sarcásticamente acerca de su antigua relación con dios.
El personaje de Mortensen se burla de todo y de todos, no respeta autoridad alguna y fácilmente inspira temor en aquellos que se encuentran cerca de él, incluyendo a los feos demonios que están a sus servicios. Se trata de un ser siniestro que no muestra arrepentimiento.
Ya que estamos con este tema, y tomando en cuenta la importancia de la figura del diablo dentro del cine de horror, les recordamos que del 23 de agosto al 1 de septiembre se realizará una nueva edición de Macabro, festival en el que seguramente el diablo estará rondando.
