Nunca pensamos que este tipo de cambios los viviría el país caribeño bajo el régimen de los Castro, pero desde el mítico saludo entre Raúl Castro y el presidente Obama en los funerales de Nelson Mandela, ya comenzábamos a ver una nueva actitud en la política de la isla.
Luego vinieron los tímidos movimientos de apertura que fueron reforzados cuando La Habana fue la sede para la segunda reunión de la CELAC, a la cual asistieron prácticamente todos los líderes latinoamericanos (incluido Peña Nieto) y aunque las relaciones internacionales no son la mejores actualmente en Latinoamérica, la diplomacia reinó en la reunión.
Pues bueno, ahora que ha recibido un espaldarazo de las naciones tanto neoliberales como de izquierda de Latinoamérica para ser un miembro activo en el continente, Cuba ha ido por más. Uno de los cambios más esperados por los ciudadanos cubanos y que ya fue aprobado oficialmente fue la instalación de la conexión rápida de internet a domicilio.
Fuentes la Empresa de Telecomunicaciones de Cuba (Etecsa) han anunciado a Reforma, que cualquier ciudadano que lo desee podrá contratar banda ancha en su casa a partir de mediados de septiembre próximo.
Aún están por detallarse los precios, aunque se sabe que tal vez estén un poco elevados para el cubano promedio, pues hay paquetes, como el de 100 horas, que están a 650 pesos o el de 90 horas nocturnas que está en 260 pesos en contra posición a los 20 dólares al mes que, en promedio, ganan los cubanos (Datos de Reforma).
Bueno, el gesto parece ser una cosa de nada, aunque para los críticos más asiduos de la isla es un cambio inesperado (pura locura octogenaría con los Castro).
Cuba y la Unión Europea
Y bueno, el acceso de apertura no quedó en internet, el gobierno cubano ha informado también el día de ayer que «acoge con satisfacción» la propuesta de la Unión Europea para negociar un acuerdo de diálogo político y de cooperación.
Según el País, se trata del primer paso para descongelar las relaciones bilaterales, lo cual supone un levantamiento del veto impuesto contra La Habana en 1996.
La respuesta de La Habana llega un mes después de que los cancilleres de la Unión Europea aprobaran por unanimidad el inicio del diálogo bilateral.
La Unión Europea respondió que recibía:
«con gran satisfacción la decisión positiva del Gobierno de Cuba y el proceso se iniciará cuanto antes […] con espíritu constructivo y de respeto mutuo»
Pero bueno, la isla dijo que estaba dispuesta dialogar de cualquier tema con los europeos «hasta del tema de los derechos humanos» con una base en el respeto a la soberanía de las otras naciones y a la no injerencia en sus asuntos internos, y bueno, algunas naciones como Alemania, Polonia y República Checa exigieron a la comisión que pida a Cuba que tenga medidas que contemplen el respeto a las libertades políticas y de expresión.
El sueño de Lula y Cuba
El día de ayer el País también publicó artículo titulado «El sueño secreto de Lula con Cuba» y habla sobre la postura que tiene respecto del caso cubano el ex líder brasileño de izquierda que llevó a su país a desbancar a México como la mayor potencia económica regional.
Su sueño es que el país caribeño se habrá paso por el camino de la democracia y que lo haga siguiendo el «modelo brasileño» ideado por él en sus ocho años de gobierno.
Lula, además, tendría el mismo sueño para Venezuela, días atrás expresó en La Habana:
«Maduro es un hombre bien intencionado que desea lo mejor para su país»
Y luego añadió:
«Venezuela necesita paz y tranquilidad para que pueda recuperar todo su potencial en la generación de riqueza»
A pesar de que es el fundador del mayor partido de izquierda de América Latina (el PT) el hombre siempre ha sido caracterizado por su pragmatismo político y decir:
«no soy de izquierdas ni de derechas»
Lo cual le ha valido tener un buen acercamiento con la banca y el empresariado internacional.
En su última conferencia en la isla, Lula les explicó a los Castro cómo conseguir atraer a los inversores extranjeros en su país. No olvidemos que Brasil mismo ha invertido recientemente en la isla y que en la cumbre de la Celac, Dilma Rousseff participó en la apertura del puerto Mariel, puerto estratégico por su cercanía al nuevo canal de Panamá.
El sueño de «brasilinizar» Cuba y Venezuela podría llegar hasta Argentina (recordemos que son los principales aliados en el bloque económico que lidera Brasil), lo cual parece un sueño guajiro, pero la cosa con Lula, es que este tipo de sueños no son tan increíblemente imposibles.
Todavía falta ver si los otros bloques de la región permitirán que Brasil continúe con su protagonismo. México, a lado de Perú, Colombia y Chile, han representado el bloque neoliberal con su Alianza del Pacífico, misma a la que ya se ha unido Costa Rica y que tiene muchos observadores más. Además, Peña Nieto ha mostrado cierto interés en que México vuelva a tener el antiguo influjo que tenía en Latinoamérica, ya ha condecorado con la máxima distinción que tenemos al presidente de Uruguay (otro aliado de Brasil) y en Cuba tuvo presencia y les recordó a los cubanos que nuestro país siempre estuvo ahí cuando Estados Unidos proclamaron el bloqueo económico a la isla.
Pero es difícil que el sueño de Lula de cumpla, hay muchos problemas de por medio, además de la crisis interna que sufre Venezuela y el constante desprestigio que sufre por los medios opositores la líder de Argentina (La Nación y El Clarín son…o eran, los medios más grandes y monopólicos del país sudamericano y eran abiertamente anti Cristina Fernández). No sabemos si Lula pueda repetir el milagro brasileño con estas otras naciones, habrá falta seguir viendo como van evolucionando cada una. Por lo pronto, parece que Cuba sí está siguiendo sus consejos ¿hasta dónde llegará su «nueva apertura»?
