Andrés Manuel López Obrador siempre ha mostrado su desdén por la corrupción… el tema ha sido prioridad en sus campañas electorales y por supuesto en su actual gobierno. Seguramente la 4T estará muy orgullosa, por eso, con el golpe que el Instituto Nacional de Migración (INM) dio precisamente ese magno problema que padecemos en México.
Resulta que gracias a que implemenataron un sistema de videovigilancia en sus oficinas, el Instituto Nacional de Migración torció a mil 40 funcionarios cuando llevaban cabo distintos actos de corrupción. ¿Qué hicieron? Pues simple, todos esos empleados ya no trabajan más para el INM.
Lo anterior fue dado a conocer por el mero mero del Instituto Nacional de Migración, Francisco Garduño, durante un evento realizado el pasado viernes en la Ciudad de México. De acuerdo con la agencia Reuters, el INM detectó diferentes irregularidades en el trabajo de los funcionarios, desde extorsiones a los migrantes que ingresan a México, hasta la manera en que algunos dormían en horas de trabajo (una práctica naaaada común en nuestro México, ¿verdad?)
Funcionarios de migración cobraban 300 pesos por fichas gratuitas
La implementación del sistema de videovigilancia es parte del programa “modernización administrativa”, y según palabras retomadas por El Universal, Garduño explicó que el principal acto de corrupción detectado en los servidores públicos de migración fue el cobro de 300 pesos por las fichas que se deben entregar de forma gratuita a quien desee realizar un trámite en el INM.
Eso sí, hay que aclarar que el Instituto Nacional de Migración no despidió a todos los más de mil funcionarios que ya no laboran más en esta dependiencia. Garduño mencionó que algunos renunciaron en cuanto supieron que sus actos de corrupción estaban registrados en video.
“Me voy a poner un tapabocas cuando no haya corrupción”: AMLO
Aunque el titular del INM no detalló las fechas o el periodo de tiempo en que se dieron los despidos y las renuncias, sí aseguró que todos los casos fueron reportados ante la Comisión Nacional de Derechos Humanos (CNDH). “No puede seguir este México atendiendo a los migrantes que llegan a nuestro país, en una forma ordenada y segura, con este tipo de acciones”, detalló Garduño.