En Mati, un pueblo costero a 30 kilómetros de Atenas, un incendio forestal se salió de control para alcanzar turistas y habitantes mientras pasaban una tarde relajada frente a las playas del mar Egeo. Docenas de automóviles quemados, casas destruidas, cientos de heridos y más de 70 muertos después, el fuego pudo ser controlado. Sin embargo, más de 15 amenazas de incendio siguen latentes en la zona sur de Grecia.
“Un desastre de proporciones bíblicas”, dijo en una entrevista Panos Skourletis, Ministro de Interior de Grecia.
Si las impactantes escenas de las incontrolables llamas no son suficiente para estremecerte, los reportes de los rescatistas y las autoridades han sido desgarradores.
Drone footage shows #GreeceFires raging through seaside resorts near the Athens, torching homes, cars and forests.
🔴Follow the story live here: https://t.co/WZGoCmiIn5 pic.twitter.com/a2Mt6cO0mN
— Sky News (@SkyNews) 24 de julio de 2018
Cerca de la costa, sobre unas montañas, el líder de la Cruz Roja en Grecia confirmó haber encontrado un grupo de 26 fallecidos en el incendio. En el grupo, los rescatistas encontraron niños, jóvenes y padres; según las primeras investigaciones, habían intentado encontrar una salida al fuego y al verse atorados, los integrantes de la familia decidieron “ver el final abrazados”.
Como el incendio empezó en los valles y montañas cercanos, la única salida de las llamas era correr hacia el mar. “Muchos visitantes y residentes no pudieron escapar”, le comentaba a Reuters, Stavroula Maliri, el jefe de bomberos. Sin embargo, la “buena noticia” es que entre la guardia costera, los botes de los locales y los valientes nadadores, más de 700 personas pudieron ser rescatadas del pueblo costero.
El alcalde confirmó que la cifra de fallecidos supera los 70.
Uno de los incendios era de 30 kilómetros y se originó al noreste; el otro, más grande, de 50 kilómetros, arrancó desde el oeste. Ambos incendios arrancaron por las condiciones secas del verano griego, pero los fuertes vientos cambiaron su dirección. En minutos, ya estaban sobre el pueblo costero. De acuerdo a los reportes de AP, el fuego llegó tan rápido que las personas no podían ni siquiera salir de sus coches.
“Es una noche difícil para Grecia”, decía el primer ministro Alexis Tsipras. Al mismo tiempo, mientras declaraba con tristeza lo sucedido, el jefe de Gobierno griego declaró tres días de luto nacional tras lo sucedido.
*Foto de portada: Sky News