Ay, las cosas que pasan en este país. Cuando uno cree que ya escuchó, vio o leyó todo, cuando uno cree que nada más le puede sorprender, siempre sale algo nuevo e increíble. Una lindura más.Dicen que durante una visita a México, Salvador Dalí dijo que no soportaba estar en un país más surrealista que sus pinturas. Otros dicen que André Breton dijo: “yo no sé a qué he venido, yo no tengo nada que enseñarles, México es el país más surrealista del mundo. Disculpen, hasta luego”. México, más que un chiste o una mala broma, probablemente sea un cuento. Así lo refrenda esta historia: la parroquia de Santa Inés, ubicada en el municipio de Zacatelco, Tlaxcala, fue multada por la Comisión Federal de Electricidad con 839 mil pesos por robarse la luz con una instalación eléctrica clandestina. Exactamente como lo leen. La propia Iglesia rompió con sus reglas y rompió el séptimo mandamiento: no robarás.
Al parecer a la parroquia le hicieron el paro desde las alturas y logró llegar a un acuerdo con la empresa paraestatal: pagará su sanción a lo largo de los próximos 18 meses. El párroco Elpidio Pérez Portilla dijo durante la misa del pasado domingo 16 de julio que el castigo contra la Casa de Dios fue por conectar la iluminación de la torre, la cúpula y la fachada de la iglesia a un medidor ilegal. De acuerdo con el periódico Reforma, el cura pidió a los feligreses su colaboración para pagar la deuda; algunos expresaron su intención de apoyar, mientras que otros responsabilizaron a Pérez Portilla por el mal manejo. La publicación indica que, originalmente, la iglesia debía más de un millón de pesos, pero que al final la sanción fue rebajada.
La parroquia de Santa Inés data del siglo XVIII y es catalogada por el Instituto Nacional de Antropología e Historia como monumento histórico. Endenantes, por su antigüedad y clasificación de monumentos históricos, a las iglesias se les condonaba el pago del servicio de energía eléctrica. Según el pároco Elpidio, desde que la reforma energética entró en vigor, este esquema se modificó. “Por muchas razones vienen los de CFE, abren los gabinetes y nunca me reportaron ‘oiga padre están robándose la luz’. Ahora, no nos oponemos a pagar pero realmente yo me llevé una sorpresa muy amarga, muy fea”, dijo el párroco. Don Elpidio también aseguró que la iluminación del templo formó parte de un proyecto para que Zacatelco se convirtiera en pueblo mágico, esta iniciativa fue impulsada por el actual presidente municipal Tomás Orea Albarrán, quien presuntamente habría ofrecido apoyo con la energía eléctrica.
En el comité nos dijeron que fue un apoyo, pero ya no es apoyo porque ahorita nos lo están cobrando
