A sólo unos días de que la Procuraduría General de la República (PGR) diera a conocer la identificación del segundo de los 43 normalistas desaparecidos, esto a partir de restos enviados a la Universidad de Innsbruck, Austria, el informe es revirado por el Equipo Argentino de Antropología Forense (EAAF).
Según el grupo de especialistas sudamericano, la identificación del normalista Jhosivani Guerrero de la Cruz no es definitiva. La aseveración se sustenta en que la coincidencia genética entre la muestra que manejó la Universidad de Innsbruck y los familiares de Jhosivani es baja, en términos estadísticos.
“La coincidencia genética mitocondrial entre la muestra ósea 16-29102014 y la madre del joven Jhosivani Guerrero de la Cruz, no es considerada por el EAAF como un resultado identificatorio definitivo”, señaló el EAAF en comunicado.
Sin desestimar el trabajo hecho en Austria, al que consideran como “de alta calidad científica”, los argentinos consideran que la identificación de Jhosinavi aún no debe de darse por sentada… sobre todo porque existen serias dudas respecto al origen de los restos que se están analizando:
La investigación se encuentra “”en el marco de un caso abierto en donde restos de víctimas de distintos episodios de desaparición pueden encontrarse en los mismos lugares de depositación. Existen además serios interrogantes sobre el origen de las muestras analizadas”, agregó el comunicado.
Además, el EAAF recordó que inicialmente los de Innsbruck intentaron producir perfiles genéticos de las 17 muestras que les envió la PGR, sin embargo, no se consiguió “debido al alto grado de deterioro por alteración térmica y fragmentación de las mismas”… con excepción de una, de la que se obtuvo “un perfil completo de ADN nuclear que dio como resultado una coincidencia genética fuerte y clara con la familia del joven Alexander Mora Venancio”, único normalista que había sido identificado, hasta ahora que la PGR dice que se consiguió hacer lo mismo con Jhosivani Guerrero.
Con mucho detalle, el equipo de expertos argentinos señaló que de las 16 muestras restantes se intentó obtener ADN mitocondrial por medio de un método experimental denominado “Secuenciación Masiva Paralela”. Con éste, se consiguió éxito en nueve casos, pero luego se informó que siete muestras correspondían a ADN mitocondrial que no era específicamente humano, por lo que se iba a considerar seguir su análisis.
De las dos restantes sí se obtuvo ADN mitocondrial, y después de analizarlo se determinó la existencia de coincidencias con familiares maternos de dos normalistas: Jhosivani Guerrero de la Cruz y Alexander Mora Venancio… no obstante estas dos muestras “provienen de la bolsa que según PGR fue recuperada del Rio San Juan, en las afueras de Cocula. No provienen de restos recuperados en el basurero de Cocula”.
El EAAF recordó que no estuvo presente en el momento en que buzos y peritos de la PGR recuperaron una de las bolsas provenientes del río San Juan, por lo que por ahora no existen “elementos científicos suficientes para vincular los restos hallados en el Basurero de Cocula con aquellos recuperados, según la PGR, en el Río San Juan”… y a eso súmenle que –según el informe del Grupo Interdisciplinario de Expertos Independientes (GIEI)- “no se ha podido establecer que en el Basurero de Cocula, existan restos humanos que correspondan a los normalistas”.