Luego de abandonar el Caribe, causando estragos materiales y cerca de 70 decesos en Haití, Cuba, República Dominicana, Jamaica y Bahamas, el huracán “Sandy” podría impactar las costas de Nueva York. Las autoridades ya toman precauciones.
Nueve estados de la costa Este de Estados Unidos se han declarado en estado de emergencia, ya que el huracán “Sandy” podría impactar esta zona -que de acuerdo a los pronósticos- podría afectar a entre 50 y 60 millones de personas. Los preparativos y “compras de pánico” ya han comenzado.
Mención especial merece el caso de Nueva York, donde las autoridades han anunciado la evacuación obligatoria de 375 mil personas, además de provocar la suspensión del servicio de transporte público, así como la cancelación de vuelos en el aeropuerto local.
Algunos de los barrios con orden de evacuación son las zonas costeras de Rockaways y Long Island City en Queens, del mismo modo se está aplicando la medida en varias zonas de Brooklyn y Manhattan.
“Estamos ordenando la evacuación por cuestiones de seguridad (…) Si vive en esas áreas, tiene que irse esta tarde”, afirmó el alcalde Bloomberg, anunciando también el cierre de las escuelas de la ciudad el lunes tras nuevos informaciones de una mayor amenaza de inundaciones. En agosto de 2011, Bloomberg evacuó preventivamente esas mismas zonas ante la llegada de “Irene”, las personas se previnieron, pero en esa ocasión Nueva York escapó con daños mínimos de ese huracán que se había degradado a tormenta tropical.
Por su parte, para el gobernador del Estado de Nueva York, Andrew Cuomo, el panorama no luce nada fácil: “hay que estar plenamente preparados” para el peor de los escenarios, señaló. No obstante, contrario a lo que se puede imaginar, la contingencia climatológica no afectará los trabajos en la Bolsa de Nueva York, ya que de acuerdo a su operador, se tiene la idea de abrir mañana lunes las operaciones de forma habitual.
Maryland, Pensilvania, Virginia, Connecticut, Nueva Jersey, Massachussets, Delaware, Rhode Island y el Distrito de Columbia son otras entidades de Estados Unidos que están tomando sus precauciones para recibir a “Sandy”, que hasta el momento se mantiene en la categoría de primer grado, desplazándose con vientos de 120 Km/h y situándose a unos 635 kilómetros de la ciudad de Nueva York.
De acuerdo a pronósticos, “Sandy” podría ser el fenómeno climatológico más grande que alguna vez haya impactado la zona continental del país. Tal es su dimensión, que ha obligado a modificar las campañas electorales por la presidencia de Estados Unidos, las cuales se han tenido que desplazar a la zona centro del país del norte y podría interrumpir el “sufragio anticipado”, debido a los cortes prolongados de energía que se vislumbran.