Su Santidad Juan Pablo II, era nombrado el “papa viajero” y a ocho años de su muerte, le hizo honor a su apodo, ya que fue visto en la ciudad de Roma ofreciendo bendiciones a quien quisiera, pero obviamente no era real, era un impostor.
Lo que para muchos fue una falta de respeto para un artista de origen eslovaco fue todo lo contrario, ya que se le vio en las calles de la ciudad italiana con una sotana blanca y una biblia en mano, pero al darse cuenta las autoridades no tuvieron opción y lo agarraron para llevárselo y darle una multa:
El problema es que era muy parecido a Karol Wojtyla. Fue detenido por usurpación de título, lo cual es un delito menor, dijo a la AFP una portavoz de la policía. La sotana con la que se vestía fue confiscada por la policía.
El hombre, cuyo nombre no salió a la luz por miedo a represalias de lo seguidores católicos, de 55 años, fue dejado en libertad, pero deberá hacerse cargo de su problema y pagar una multa que podrá ir desde los 154 hasta los 929 euros (entre 200 y 1,200 dólares), dependiendo de la decisión del juez.
Esta multa la podrá pagar facilmente, ya que el hombre había estado pidiendo limosnas desde hace unas semanas, usurpando la imagen del fallecido papa, pero ya no podrá seguir con sus triquiñuelas, a menos que quiera otra multa.