¿Han escuchado hablar de Kevin McGill? Obvio no, nunca habían oído de él. Se trata de un recolector de basura en un barrio de gente de mucho dinero llamado Sandy Springs en Estados Unidos y el muchacho estará en prisión por la razón más extraña del mundo.
Resulta que el barrio donde trabaja tiene prohibido que los recolectores empiecen su chamba antes de las 7 de la mañana para que los pobrecitos ricos no interrumpan su sueño. Nuestro muchacho Kevin es un hombre que vive bajo sus propias reglas, empezó a las 5 am un día, lo cacharon y todo se puso feo.
El fiscal del caso dijo que multar a la compañía responsable no iba a funcionar, además de que para sorpresa de todos, pidió el castigo más manchado que pudiera alcanzar el buen Kevin, algo a lo que el juez accedió.
Si creían que ir a prisión era su único problema, pues están en un error. Kevin tiene que mantener a su familia por lo que acordó que irá a la cárcel durante 14 fines de semana seguidos, pero que trabajará recolectando basura de lunes a viernes.
Nuestro amigo no contaba con abogado cuando todo esto fue decidido, pero ya consiguió uno que tampoco puede creer que alguien vaya a prisión por recoger basura.