Si eres de esas personas que no han tenido COVID-19 desde que inició la pandemia, seguramente te costará dimensionar el tema. Pero si, por el contrario, ya superaste la infección del virus, entenderás muy bien lo que un ciudadano británico tuvo que soportar.
16 meses con COVID-19
Se trata de nada menos que la infección más larga de COVID-19 de la que se tenga registro hasta la fecha en que se publica esta nota. El hombre pasó un total de 505 días contagiado con coronavirus y pues ALV!
Si las matemáticas no nos fallan, hablamos de poco más de 16 meses, lo que también podemos traducir a un año y casi 5 meses. Ese fue el tiempo total que el ciudadano británico dio positivo a coronavirus.
Cabe mencionar que esto no se trata de una historia viral que haya salido a la luz de forma circunstancial, lo que permitiría poder poner en duda que la persona haya estado contagiada tanto tiempo ininterrumpidamente. No, lo anterior fue establecido por científicos británicos en el 32º Congreso Europeo de Microbiología Clínica y Enfermedades Infecciosas.
De acuerdo con la BBC, los investigadores documentaron plenamente el caso y presentan los resultados en el mencionado Congreso, el cual se lleva a cabo desde este 23 de abril y hasta el próximo martes 26 allá en Lisboa.
No se trató de un caso de múltiples reinfecciones
Los científicos, pertenencientes al King’s College London y al Guy’s and St Thomas’ NHS Foundation Trust, explicaron que el paciente británico tenía un sistema inmune bastante debilitado y fue por eso que nunca pudo eliminar el virus.
El hombre, que no fue identificado en la investigación, se contagió de COVID-19 a principios de 2020, cuando la pandemia apenas empezaba. Fueron en total 72 semanas de estar ingresando y saliendo del hospital, sin embargo, en cada hospitalización se confirmaba que tenía el virus.
Y ojo, porque no era que el COVID-19 iba y venía. Un análisis de laboratorio deja claro que se trató de la misma infección los 505 días, no de un caso de constantes reinfecciones.
“El paciente nunca presentó una prueba negativa. Y podemos decir que fue una infección continua debido a su firma genética: la información que obtuvimos de la secuenciación del genoma viral fue única y constante”, declaró a la citada BBC Luke Blagdon Snell, uno de los médicos a cargo de presentar la investigación.
El paciente murió a finales del año pasado
Lo más triste de todo este caso, es que la cifra quedó en 505 días no porque el paciente se haya curado finalmente. Murió en 2021 mientras estaba hospitalizado por complicaciones de otras enfermedades que padeció paralelamente al COVID-19.