El atentado en contra de un empresario en las cercanías de la Terminal 2 del Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México (AICM) sacudió a la mañana chilanga… pero en el transcurso de los días hemos ido conociendo más acerca del caso y de las oscuras intenciones de los presuntos asaltantes.
Según las primeras investigaciones se trató de un ataque directo, a sueldo y planeado durante más de un mes por la Unión Tepito.
Sabemos que uno de los atacantes murió al momento de ser atropellado por el guardaespalda del empresario mexicano, pero durante el fin de semana supimos de la detención de otras cuatro personas implicadas… y ahí se puso complicado el asunto.
Uno de los hombres, señalado como el líder de la operación, es conocido como El Alemán y se reporta que recibió cerca de 2 millones de pesos por llevar a cabo el ataque. Los jóvenes —autores materiales del atentado— recibieron 2 mil pesos.
Cuando El Alemán fue detenido lo encontraron con fotografías del empresario y donde su rostro, como si fuera película hollywoodense, estaba marcado en rojo. La Secretaría de Seguridad Ciudadana (SSC) llevó a cabo tres cateos en varios domicilios y encontraron, ahí también, imágenes de la víctima.
De acuerdo con las primeras revelaciones de la investigación, compartidas por El Universal, el grupo de sicarios estuvo siguiendo al empresario atacado en la Terminal 2 del AICM durante un mes.
En los cateos encontraron también bolsas “de polvo blanco”.
Grupo de Sicarios, contratado
La Secretaría de Seguridad Ciudadana (SSC) asegura que las cuatro personas detenidas —así como el joven que perdió la vida— presuntamente trabajaban en un grupo de sicarios, contratado para la ocasión.
“Los detenidos podrían estar relacionados con un grupo delictivo dedicado a la extorsión, secuestro, homicidio y venta de droga en la zona”, señalaron en un comunicado. Algunas filtraciones aseguran que los contrataban para cumplir asesinatos a sueldo en la Ciudad de México… y el de la Terminal 2 del AICM era uno más de sus trabajos.
Las autoridades no han señalado a nadie más de ser el autor intelectual del atentado, pero no duden que esto no sea lo último que hemos escuchado sobre el caso.
¿Y la víctima? Se encuentra a salvo y su nombre se ha filtrado a los medios de comunicación, pero —aunque no te lo vamos a contar acá— se trata de un empresario dedicado al sector restaurantero y que, comentaron, tenía negocios en puerta en el estado de Quintana Roo.