Muchos días de combates y negociaciones fallidas han dado como resultado que la violencia del conflicto que se sostiene en la Franja de Gaza amenace con incrementarse.
La propia televisión que cubre de cerca el movimiento de Hamas informó sobre la ejecución de 18 personas, por el simple hecho de ser “sospechosas” de colaborar con Israel, en un ambiente en el que ya es incontable el número de muertos, dado que hasta ahora continúan los ataques de ambas partes.
Según se informó, una primera parte de los sospechosos fue ejecutada ayer por la mañana y siete horas después el resto de las 18 personas. La masacre se realizó en el centro de la ciudad, frente a una mezquita y ante la mirada de varios asistentes. Dos de los asesinados eran mujeres, aseguró un funcionario del movimiento islamista.
Colocándolo frente a la pared, con un pequeño letrero en el que enunciaba el crimen del que se les acusaba, así fueron ultimados los presuntos colaboradores del gobierno de Tel Aviv: “Vendió su alma al enemigo por un precio muy bajo”, rezaba el papel que les era colocado sobre la cabeza a cada uno de los ejecutados, señala uno de los testigos.
“Ellos entregaron al enemigo información sobre el paradero de combatientes, los túneles de resistencia, las bombas, las casas de los combatientes y los lugares de (lanzamiento de) cohetes, y la ocupación bombardeó estas áreas y mató a varios milicianos (…) Por tanto, fue impuesto el fallo de la justicia revolucionaria”, podía leerse en una pared cercana a los cuerpos y firmado por Resistencia Palestina. Luego de ser asesinados, una ambulancia llevó los cuerpos hacia un destino desconocido.
Aunque continúan los bombardeos, los cuales cobran vidas y dejan a varios heridos, ahora se habla más de asesinatos como los cometidos ayer: a principios de la semana, un comando asesinó a la esposa e hijos del jefe militar israelí Mohammed Deif. Los presuntos asesinos portaban uniformes de Hamas e hicieron llamar a su operación “Estrangulando gargantas”.
Según medios de comunicación, lo anterior representa una nueva forma de controlar a los presuntos “colaboracionistas” de Israel. Los sospechosos serán enfrentados en ‘el campo’ y ya no en tribunales, advierte Al Rai, pagina web presuntamente administrada por Hamas, en el que además se adelanta que castigos del mismo calibre “se impondrán a otros en breve”.