El mejor en la clasificación, el mejor sobre la pista, con el mejor equipo, Sebastian Vettel, se metió a la bolsa 25 puntos, después de adjudicarse el GP de Malasia, segundo de la temporada 2013, con un tiempo de 1:38:56.681. El mexicano de McLaren corrió la vuelta más rápida.
Desde la primera vuelta, las cosas no pintaron bien para Fernando Alonso en su Premio 200, ya que en la primera vuelta, después de un pequeño choque con Vettel, la parte delantera del Ferrari F138, quedó colgada, para más tarde, definitivamente romper la trompa del coche y salir de la carrera.
La vuelta 5 y 6 marcaron dos rebases para Checo Pérez, uno de parte de Hulkenberg, quien después de dos curvas, arremetió contra el mexicano, que no pudo defender su posición y fue desplazado a la octava plaza y más tarde, después de que Vettel saliera de los pits, Checo se fue hasta el sexto lugar, tras adelantar al alemán, aprovechando que tenía las llantas frías.
Para romper el hielo, Lewis Hamilton, quien corrió para McLaren la temporada pasada, en su primer entrada a los pits en este premio, cometió un error para reirse: entró con su equipo anterior y no con Mercedes, pero se avivó y recompuso a tiempo, pasó a su equipo y siguió la carrera.
Ya con la pista un poco seca, después de una ligera lluvia, el agua comenzó a correr como debía, en la vuelta 10 las posiciones estaban así: Webber, Vettel, Hamilton y Roseberg, en los primeros cinco lugares, Checo ocupó el octavo puesto, mientras que Guti estaba en la decimotercera posición.
Por segunda carrera consecutiva, Pastor Maldonado, el sicario de las pistas cometió un error, hizo un trompo en la vuelta 14, después de dañar su alerón delantero, por lo que Esteban, que lo persiguió muy de cerca, logró rebasarlo, pero después lo imitó y salió de la pista dos vueltas después, pero no repercutió en nada.
El segundo abandono en la carrera llegó en la vuelta 24, cuando Paul di Resta y el equipo de Force India no pudieron arreglar algunos problemas técnicos con los neumáticos del VJM06 y no pudieron hacer que el británico saliera nuevamente a correr.
Gasto de gasolina, altas velocidades, una gran presión, se pudieron palpar justo a la mitad de la carrera, en una disputa por el podio entre Webber, Vettel, de Red Bull y un veloz Hamilton, que no dejó de presionar en ningún momento, en ese momento Checo era décimo y Guti doceavo.
Después de una muy buena carrera en Australia, Adrián Sutil, que ya sumó sus primeros 6 puntos, esta vez no tuvo la misma suerte y al cruzar la línea media del Gran Premio, al entrar a pits, igual que su coequipero, tuvo que abandonar la carrera, siendo el tercer piloto que tuvo que decir basta.
Después de correr la vuelta 35, la disputa por el segundo puesto fue a muerte, Hamilton, Vettel y Rosberg, que se turnaron en diferentes ocasiones ese lugar y, en la medida de lo posible, acercarse al líder momentáneo, Mark Webber.
La vuelta 44 marcó el andar y el resultado en Malasia, ya que después de que Webber entró a fosos, Vettel quiso superarlo, pero gracias al gran trabajo del equipo de Red Bull, quien no hizo perder tiempo al australiano y así pudo mantener su primer puesto, el alemán intentó e intentó, por izquierda, por derecha, tomando curvas por adentro y por fuera, pero no pudo.
Esto no duró mucho, Vettel, con el pie bien puesto en el acelerador y la cabeza puesta ya en el primer puesto del podio, logró por fin rebasar a su coequipero, que no lo pareció y se dieron con todo en la pista durante más de 4 giros.
Corrío la vuelta 49, un piloto venezolano hizo hasta lo imposible para mantenerse en la pista después de algunos desperfectos en las primeras rodadas, pero no, eso fue imposible y por segunda vez en la temporada, siendo Malasia el segundo Premio, abandonó la carrera, Pastor Maldonado.
Faltando una vuelta para terminar la carrera, el equipo McLaren, que insistió con mantener sus neumáticos, que no resistieron hasta el final y tuvo que entrar a pits, por lo que terminó por ocupar la novena posición para marcar sus primeros 2 puntos. Mientras que Gutiérrez se quedó en el doceavo puesto.
La próxima carrera, donde Red Bull buscará mantener su hegemonía se celebrará en el Circuito Internacional de Shangai, siendo el GP de China el tercero de la temporada 2013 de la Fórmula Uno.