En las últimas horas el flujo informativo ha girado alrededor de la cancelación de la visita del presidente Enrique Peña Nieto a Estados Unidos y el incidente con la bandera mexicana. Pero la escalada de violencia en el país continúa. Este fin de semana se registraron al menos 28 homicidios en Guanajuato, entidad gobernada por el panista Miguel Márquez Márquez. En el municipio de Apaseo El Grande se reportaron 13 asesinatos el pasado sábado 24 de febrero.
En la comunidad de San Julián fueron hallados cinco cuerpos con señales de tortura, maniatados y con tiro de gracia. En Apaseo, dos personas más fueron asesinadas, sobre la autopista Celaya-Querétaro. Sus cuerpos fueron calcinados dentro de una camioneta. De acuerdo con información compartida por autoridades estatales, otras dos personas fueron encontradas en los alrededores de la carretera; estos fueron colgados a un costado de la vía.
La noche del sábado, cuatro hombres fueron ejecutados en la comunidad de El Nacimiento.
El 23 de febrero, tres empleados de la Central de Abastos de Celaya fueron asesinados después de ser atacados por sicarios. De acuerdo con el periódico Reforma, durante este fin de semana se registraron siete asesinatos en esta localidad. También hubo ejecuciones en las comunidades rurales de Ejido de Galvanes, Camino a Jofre, además de los municipios de Irapuato y Salamanca.
El jueves 22 de febrero, Pedro Galván, comandante de la Policía Municipal de Celaya fue ejecutado mientras se dirigía en bicicleta hacia su trabajo.
¿Qué está pasando en Guanajuato?
Esta es la pregunta que todos nos hacemos. El año pasado se registraron mil 100 homicidios en esta entidad. De acuerdo con el procurador Carlos Zamarripa Aguirre, 82% de los casos corrieron a cargo del crimen organizado. En lo que va de 2018, suman alrededor de 200 asesinatos en Celaya, León, Silao, Yuriria, Valle de Santiago, Salamanca y Apaseo El Grande.
El pasado 30 de enero, 3 mil 200 elementos de la Policía Militar arrancaron operaciones en 19 municipios de Guanajuato. Un par de semanas después, José Luis Chiñas Silva, jefe de esta división, aseguró que la violencia no acabaría de la noche a la mañana y que era imposible poner un plazo para restablecer la paz en el estado.
En su columna de este lunes 26 de febrero, el periodista y académico Ricardo Raphael hace una radiografía de la situación. En su texto denuncia que “ninguna autoridad parece hacerse cargo” de la violencia en el estado. Por un lado, el gobierno de Márquez Márquez ha asumido que se trata de un pleito entre bandos del narcotráfico y que es responsabilidad del Gobierno Federal.
Según el también escritor, “a pesar de que, desde el año pasado, la presencia militar ha crecido mucho en esta entidad (…) resulta evidente que de nada han servido las Fuerzas Armadas a la hora de controlar el desastre“.
En otro fragmento de su colaboración para el diario El Universal, Raphael señala que “tampoco los funcionarios federales, de tan ocupados que están en asuntos de grilla electoral, sufren indolencia grave frente a tamaño polvorín”. De acuerdo con el periodista, en febrero aparecieron mensajes firmados por el Cártel Jalisco Nueva Generación (CJNG) en los que amenazaban de muerte a integrantes del Cártel de la Unión de León.
Estos, a su vez, circularon grabaciones en las que denunciaban a policías corrompidos por el cártel rival. En lo que va del año han sido asesinados 13 agentes en Guanajuato.