Pues que dice Grupo Salinas que no importa que Pemex haya comprado a la empresa Fertinal a 200 millones de dólares más de su valor, siendo que estaba ya casi en quiebra… ¡fue un negociazo! (cof, del cual presuntamente se benefició su presidente, cof, Ricardo Salinas, Pliego, cof).
En respuesta al reportaje que ayer se aventó a publicar The Wall Street Journal, en el cual se explicaban los vínculos de Ricardo Salinas Pliego con Fertinal, y con los cuales se benefició al momento de que Pemex sacó la cartera y pagó 635 millones de dólares por ella… Grupo Salinas descalifica y dice que se trata de “un burdo trabajo de recopilación de información” de la que ya se tenía conocimiento.
Pero, ¿es verdadera esa información? Ehrrrrr… pues según Grupo Salinas, WSJ sólo presentó datos “inconexos” que atacan la “buena reputación del señor Ricardo Salinas Pliego y su relación con el presidente López Obrador”.
Seeeeeeeee, pero, ¿la información que se publicó es verdad? La carta que firma Tristán Canales, VP de Asuntos Públicos de Grupo Salinas, no señala que los datos del WSJ sean mentira… peeeeeeero aclara que la información que publicó ayer en su reportaje titulado “Documents Tie Mexican Mogul to Company at Center of Fraud Probe” (algo así como “Documentos vinculan a magnate mexicano con empresa que es central en fraude) es parte de un juicio de 2005 que ya fue saldado.
En relación al artículo publicado el día de ayer en el diario The Wall Street Journal, #GrupoSalinas envió esta respuesta al medio; hoy la hacemos del conocimiento público. pic.twitter.com/1bUryZ9DVW
— Grupo Salinas (@gruposalinas) September 5, 2019
Según el reportaje de WSJ, al momento de que Pemex compró a sobreprecio la empresa fertilizante Fertinal, en 2016, Ricardo Salinas Pliego poseía acciones que lo beneficiaron de muy buena forma. No directamente, pero sí tenía vínculos con la empresa con sede en Suecia, NPK Holding AB, la cual era tenedora de 24.4% de Fertinal, así como con Base Rock BVBA en Bélgica, que poseía el 4.5% de las acciones de la empresa… así, a Salinas Pliego le cayó de maravilla que la paraestatal pagara 635 millones de dólares por una empresa casi en quiebra (y con deuda).
Aunque a primera vista cualquiera podría decir que la compra que Pemex hizo no fue naaaada benéfica, esto lo confirmó una auditoria realizada en 2017, en la que se determinó que para que Fertinal volviera a cumplir medianamente los estándares de seguridad, ambientales y operativos, el gobierno debería inyectarle, mínimo, 315 millones de dólares.
Pese a estos señalamientos, Grupo Salinas asegura estar “orgulloso de la exitosa transacción de Fertinal”, ya que ¿fue provechosa para Pemex?, ¿la empresa en bancarrota fue reactivada y consiguió ser redituable para la paraestatal?, ¿resultó que no se vendió a sobreprecio y las investigaciones ofrecieron datos exagerados? Pues no… porque se demostró que “la operación de compra-venta fue totalmente transparente y legal”… ah bueno.
¿Nomás por eso? Grupo Salinas añade que Fertinal sí resultó ser una empresa “activa y exitosa”… en su momento, ya si ahora se califica como empresa chatarra eso es otra cosa. “El estado actual de Fertinal es responsabilidad exclusiva de sus compradores, quienes despidieron al personal calificado y desarticularon su sólida estructura operativa, terminando con un negocio en crecimiento y condenándolo al fracaso”.
Algo así como “yo te lo vendí chido… si te salió mal, es tu bronca”.