Inolvidable resultó la “primera vez” de nuestro robusto héroe, quien pensó por un momento que –literalmente- había mandado a su novia al cielo.
Gregg Casarona es un hombre robusto y virgen, tenemos que remarcar “virgen”, ya que eso pudo haber sido el factor decisivo para casi matar a su novia, Jen Gerakaris, una frágil mujer que pesa tres veces menos que su pareja: él 150, ella 50.
El asunto es que esta pareja-dispareja decidió tener sexo por primera vez, y fue tal la enjundia que Gregg le colocó a sus arremetidas que –así como lo ven en imagen- hizo que su novia golpeara la pared de yeso.
“Mi reacción inicial fue: ¡ya la maté!”, confesó Casarona al New York Post: “Es mi primera vez… y Jen está muerta”.
Sin embargo, luego de unos segundos, la no menos jacarandosa mujer reaccionó y quejosa preguntó: “¿Por qué paraste?”… pero no porque quisiera seguirle, sino por verse alivianada con su robusto compañero: “Parecía que le iba a dar un ataque al corazón, sólo quería aligerar el ambiente”.
Sin embargo, Jen al poco tiempo empezó a sentir náuseas y mareos, por lo que en friega fue llevada a un hospital local, en Nueva Jersey.
Lo bueno del asunto–si así puede considerarse- es que ahora la pareja será famosa, ya que formará parte del programa de TV “Sex Sent Me to the ER”, en el que los participantes contarán la forma en la que medio se mueren por andarle dando gusto al cuerpo.
Como parte del show estará “la mujer que tuvo un orgasmo de dos horas”, una pareja que se lesionó por tener sexo en el armario del conserje y un hombre que tuvo un derrame cerebral mientras le ponía “Jorge al niño”… promete ser un programazo.
