Lo que necesitas saber:

Por casi 10 años, el entonces esposo de Gisèle Pelicot la drogó y permitió que varios hombres abusaran de ella sexualmente. En el juicio, varios de ellos aceptaron lo hecho: "sí, yo fui tu violador"

Tras un juicio que duró un par de semanas, todos los hombres acusados de violación en el caso Gisèle Pelicot fueron hallados culpables. Eso desde el primer día casi estaba claro, pero hoy se ha dictado su sentencia.

Infografía de Volcánicas, una red feminista de periodismo en América Latina. Foto: @VolcanicasRev

El exesposo fue sentenciado a 20 años de prisión

Tras ser encontrados culpables de abusar sexualmente de Gisèle Pelicot por invitación de su entonces esposo, Dominique Pelicot, las 50 personas fueron sentenciadas a penas que van de los tres a los 15 años. 

De acuerdo con medios internacionales, del total personas culpables de abusar de Gisèle Pelicot (con edades de entre los 26 y 74 años), 47 recibieron castigo por violación, dos por tentativa y dos por agresión sexual. Dos de ellos lograron pena de prisión suspendida.

“Todas las mujeres del mundo te apoyamos Gisèle Pélicot”. Foto: @Nabilla

Por su parte, el exesposo de Gisèle Pelicot, Dominique (ahora considerado uno de los mayores agresores sexuales de la historia moderna de Francia), fue sentenciado a 20 años de prisión. 

Algunos consideran que fue una pena muy baja para el hombre de 71 años, quien no hubiera caído, de no ser porque un guardia de seguridad lo detuvo in fraganti mientras tomaba fotos debajo de las faldas de chicas. Esto, en un supermercado. 

La investigación de este “incidente” llevó a encontrar en el celular de Dominique Pelicot parte de las atrocidades que cometió por casi una década: fotos y videos de los abusos sexuales en contra de su exesposa.

Foto: Brouettehurlante

“Que la vergüenza cambie de bando”: Gisèle Pelicot

A la entrada del inmueble donde escuchó las sentencias en contra de sus agresores sexuales, Gisèle Pelicot fue aclamada por grupos de mujeres y hombres. No es para menos: en Francia –y en el mundo– es vista no como una víctima, sino como una heroína, por su posición ante lo que le sucedió. 

“Que la vergüenza cambie de de bando”, fue lo que dijo Gisèle Pelicot al decidir enfrentar a su esposo y sus agresores… y no sólo eso: renunció a su derecho al anonimato e hizo público el proceso. 

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