Luego de un extenso estudio realizado con el cuerpo de una viejita de 83 años (ya muerta), un ginecólogo en Estados Unidos afirma haber encontrado el supuesto centro del extremo placer femenino: el Punto G.
De acuerdo con el doctor Adam Ostrzenski, del Instituto de Ginecología de St. Petersburgo, Florida, el misterioso y orgásmico punto es como una pequeña cavidad bien definida en la parte posterior de la membrana perineal, a 16.5 milímetros de la parte superior del orificio de uretra, creando un ángulo de 35 grados con la parte lateral de la uretra.
Tras diseccionar el cuerpo de la venerable mujer que donó su cuerpo a la ciencia, Ostrzenski extrajo el Punto G y comenta que éste medía 8.1 mm de largo y tenía un ancho variable entre 3.6 mm y 1.5 mm y una altura de 0.4 mm.
“Este estudio confirma la existencia anatómica del punto G, lo cual puede conducir a una mejor comprensión y mejora de la función sexual femenina”, señala Ostrzenski, en un artículo publicado en Journal of Sexual Medicine, que ya había sacado en 2008 un estudio similar que concluyó que la característica anatómica existe, pero sólo algunas mujeres la tienen… o sea que quedamos en las mismas.
Así que es mejor olvidar este hallazgo de la ciencia y seguir experimentando. Seguro es más divertido que estar al pendiente de si lo encontramos o no. Además, como bien pregunta el consejero sexual, Ian Kerner, ¿puede hacerse una conclusión definitiva con un solo cadáver estudiado?
