Recientemente el asesinato de George Floyd, un hombre afroamericano, en Minneapolis, Estados Unidos, ha puesto sobre la mesa nuevamente un tema que siempre ha existido en nuestro vecino del norte:  el papel autoritario y extremista que han tenido las autoridades con las minorías raciales durante años y años.

Sin embargo este no es el único suceso. Acá te dejamos una lista con los 7 casos de racismo ocurridos en los últimos años y que, en la mayoría, no se llegaron a dictar cargos criminales contra el o los responsables.

Michael Brown

El 9 de agosto de 2014, un joven negro de 18 años (Michael Brown) iba caminando con un amigo por una calle de dos carriles en el suburbio de St. Louis en Ferguson, Missouri. Un oficial de la policía que iba en su patrulla les pidió que usaran la banqueta y tras hacerse de palabras, el oficial y Brown comenzaron a pelear.

En cuestión de segundos el policía sacó su arma y disparó matando al joven que estaba desarmado. El cuerpo permaneció tirado en la calle por cuatro horas y media.

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Los días siguientes las manifestaciones por su muerte se intensificaron cada vez más hasta llegar al punto de que la policía antidisturbios lanzaron gases lacrimógenos y dispararon balas de goma para intentar dispersar la multitud.

A pesar de los testigos y los descubrimientos en el caso, el Departamento de Justicia se negó a presentar cargos en contra del oficial Darren Wilson, quien renunció después del hecho.

Hasta la fecha no hay justicia y el padre de Brown aún exige, casi 6 años después, que se reabra el caso.

Eric Garner

El 17 de julio de 2014, un afroamericano de 43 años de edad fue estrangulado por un oficial del departamento de Policía de Nueva York.

Este trágico día, policías intentaban arrestarlo por supuestamente vender cigarros ilegales. De acuerdo con testigos y el video existente, el agente Daniel Pantaleo practicó una maniobra de estrangulamiento contra el hombre y lo tiró hacia la banqueta. 15 o 19 segundos después Garner había fallecido.

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A pesar de que este hecho fue catalogado como homicidio, el jurado del condado de Richmond exculpó al policía y un año después, la ciudad de Nueva York anunció un acuerdo extrajudicial para pagar 5.9 millones de dólares a la familia de Garner.

Fue en agosto del año pasado cuando el comisionado de policía de Nueva York anunció que el oficial Pantaleo fue despedido sin que existieran cargos contra él.

Como en el caso anterior y en todos, las últimas palabras fueron “No puedo respirar”.

Tamir Rice

El 22 de noviembre de 2014, dos oficiales de la policía de Cleveland, Ohio, respondieron a una llamada con respecto a un hombre negro que tenía una pistola y apuntaba a la gente.

Al llegar al lugar, el oficial Timothy Loehmann pidió a un joven afroamericano de 12 años que levantara las manos ya que traía lo que al parecer era un arma y coincidía con el reporte.

Al intentar levantar las manos, el policía disparó dos veces dándole en el torso. El niño estaba jugando con una réplica de una pistola Airsoft de juguete. De acuerdo con los testigos, el joven no insultó al policía ni se resistió a levantar las manos, sino que primero guardó la réplica del arma en su cintura.

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Bajo el argumento de que el oficial actuó pensando que se trataba de un arma, el FBI determinó en la investigación que la respuesta del policía fue justificada y no se presentaron cargos.

De hecho, en 2018, el oficial Loehmann fue contratado por un departamento de policía en Ohio. La ciudad de Cleveland pagó a la familia del joven asesinado 6 millones de dólares como compensación.

Freddie Gray

El 12 de abril de 2015, en Baltimore, un hombre negro de 25 años (Gray) fue arrestado por el Departamento de Policía por presuntamente poseer un cuchillo.

En el trayecto el hombre cayó en coma y murió siete días después por lesiones en la médula espinal y una herida en la cabeza.

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De acuerdo con los testigos, los 6 oficiales involucrados utilizaron un exceso de fuerza en su arresto. En mayo de ese mismo año se presentaron cargos que van desde asesinato en segundo grado hasta agresión.

Después de que se celebraran juicios separados, finalmente en julio de 2016 todos los oficiales quedaron absueltos. El Departamento de Justicia no presentó cargos. La compensación para la familia fue de 6.4 millones de dólares.

Walter Scott

El 4 de abril de 2015, Scott fue detenido por un oficial de policía en North Carleston, Carolina del Sur, por una luz de freno de su automóvil no funcionaba.

Tras hablar con el y regresar a su patrulla, el afroamericano de 50 años salió corriendo y el oficial Michael Thomas Salger corrió detrás de él.

Cuando lo alcanzó tuvieron un enfrentamiento físico y el policía disparó su taser. Scott logró huir y el oficial le disparó ocho veces por la espalda.

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En el informe policial se escribió que el hombre negro había tomado el taser, por lo que el policía tuvo que disparar. Sin embargo, un video grabado por un testigo demostró que no fue así.

El oficial Slager fue arrestado y permaneció caso 9 meses en prisión por asesinato para después quedarse en arresto domiciliario. El 5 de diciembre de 2016 el juez declaró juicio nulo.

En diciemrbe de 2017 un juez federal condenó al oficial a 20 años de prisión y aún continúa preso. La Ciudad de North Charleston acordó pagar 6.5 millones de dólares a la familia de Scott.

Philando Castile

El 6 de julio de 2016, el oficial Jeronimo Yañez disparó y asesinó a Castile tras pedirle que detuviera su vehículo porque “parecía ser sospechoso de un robo”.

De acuerdo con la testigo, la novia de hombre negro de 32 años, y un video grabado por ella, el oficial le pidió al joven sus documentos de identificación y su licencia de conducir.

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Antes de hacerlo, Castile le advirtió al policía que tenía un arma en el auto pero que tenía permiso de portarla. Al intentar sacar sus papeles el oficial le disparó cuatro o cinco veces.

En junio de 2017 el oficial Yanez fue declarado inocente de homicidio en segundo grado y absuelto de dos cargos de uso intencional de arma de fuego. La compensación para la familia de Castile fue de 3 millones de dólares.

Trayvon Martin

El 26 de febrero de 2012, en Sanford, Florida, George Zimmerman asesinó de un disparo a un estudiante afroamericano de 17 años.

Zimmerman era el coordinador de vigilantes del vario en donde Trayvon Martin estaba visitando a sus familiares. Bajo el argumento de que se veía sospechoso y que supuestamente había corrido tras un enfrentamiento violento, Zimmerman disparó.

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Debido a que “faltaba evidencia”, el Departamento de Justicia de Estados Unidos no presentó cargos y en diciembre de 2019 Zimmerman demandó a la familia de Martin en compensación por los daños recibidos.

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