Cuando desde el gobierno federal se advirtió que la cancelación de la construcción del Nuevo Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México (NAICM) se perderían miles de empleo, nunca aclararon que algunos de los desempleados serían personas dedicadas a la nada honesta labor del robo de combustible de Pemex.
¿A que nos referimos? Ahh pues resulta que los camiones que transportan los materiales de la mega obra que nos dejará el gobierno de Enrique Peña Nieto utilizan “huachicol”… sí, combustible robado directamente de los ductos de Pemex. Y no lo dice “ya sabes quién”, ni alguno de sus fans, sino el presidente de la Comisión Especial de la Cámara de Diputados que se encarga de la vigilancia de la obra, Rafael Hernández Soriano.
Denuncian daños colaterales por la construcción del NAICM, entre ellos el uso de huachicol https://t.co/hrX81R8cAr
— Proceso (@revistaproceso) 6 de abril de 2018
Aunque apenas se confirma esta información, la denuncia se hizo desde hace varios días. Todo indica que góndolas y camiones que transportan materiales extraídos de minas de la región de Teotihuacán y localidades aledañas a la construcción del NAICM se abastecen con huachicoleros. Por esta situación, habitantes de las zonas mencionadas exigen la presencia de las autoridades para que el ilícito no continúe.
De hecho, la presencia de los huachicoleros podría considerarse como un daño “colateral” de la construcción del nuevo aeropuerto. Previo a que iniciara la obra, el huachicoleo no existía en la región, según indican vecinos de la zona. “Hicimos un recorrido por la zona y descubrimos el almacenamiento de hidrocarburo robado. Acudimos con el presidente municipal para que diera fe de lo que encontramos y después interpusimos una denuncia ante la Procuraduría General de la República (PGR) por el uso en la obra de combustible robado”, señaló Hernández Soriano.
El asunto no se quedó en el mero señalamiento. De acuerdo con información de Milenio publicada el pasado 27 de marzo, Hernández informó que se presentó a denuncia correspondiente ante la Procuraduría General de la República (PGR) por el funcionamiento de una estación ilegal de combustible en las minas “Los Bosques” en San Agustín en Teotihuacan, que es donde los camiones de carga que transportan basalto y tezontle a la construcción del NAICM se surten de gasolina y diésel.
Nomás para recordar hasta dónde podría llegar el castigo por el delito, el presidente de la Comisión señaló que el artículo 18 de la Ley para Sancionar Delitos de Robo a Hidrocarburos indica que en la cadena delictiva, quien financie indirectamente a estas bandas tiene responsabilidad… y bueno, quién financia el proyecto sino la Secretaría de Comunicaciones y Transportes. Por omisión, hay una participación en el huachicoleo por parte de las autoridades, señaló.