¿Para qué armar una fiesta en un salón o rentar una hacienda si la nación nos puede proveer de sus recintos históricos, verdad?
Parece que ese fue el razonamiento del coordinador del Programa de Pensión de Adultos Mayores de la delegación de la Sedesol en Tlaxcala, Agustín Bretón Stankiewicz, pues según el diario Reforma, celebró su matrimonio en el patio del Instituto Tlaxcalteca de Cultura.
Con el permiso del gobierno del estado, que es quien administra el sitio, el funcionario celebró el pasado sábado su matrimonio con Elvia Tamayo Sandoval, hija de un empresario de la entidad.
La ceremonia religiosa fue encabezada por el obispo Francisco Moreno Barrón y se celebró en la basílica de Ocotlán. Luego tuvieron su recepción en el patio del Instituto, espacio fundado en 1983 para la promoción del arte y la cultura en esa entidad.
Al lugar asistieron más de 100 invitados, para algunos de ellos fue reservado el hotel San Francisco, que también administra el gobierno estatal.
En la fiesta estuvieron presentes diputados locales, alcaldes del PRI y del PAN, dirigentes y funcionarios.
Y si el estado de Tlaxcala no tenía suficientemente consentida a la feliz pareja, también hubo elementos de la policía estatal cuidando la fiesta.
El diario Reforma buscó al director del Instituto, Willebaldo Herrera Téllez, para conocer bajo qué condiciones permitió la fiesta del también sobrino de la diputada María Antonieta Stankiewicz. El señor no fue localizado.
Así que se procedió a pedir información sobre los requisitos del Instituto para rentar el lugar y celebrar un evento social. Al respecto respondieron que sólo se podían hacer eventos culturales y que para ello se necesita presentar una solicitud por escrito con anticipación que detalle la exposición y las salas requeridas.
¿Cómo justificará el gobierno de Tlaxcala todo este evento digno de una microaristocracia? ¿dirán acaso que todo fue parte de un performance?
