“Candil de la calle, oscuridad de su casa” probablemente es el refrán favorito de la vicepresidente de Guatemala, Roxana Baldetti, quién criticó la declaración patrimonial de Peña Nieto, pero no se atreve a presentar la suya.
Lo gracioso de publicar el patrimonio es conocer la manera irrisoria en la que gastan nuestros impuestos y qué mejor que culpar a otros para expiar nuestras penas; durante una entrevista con la radiodifusora guatemalteca Emisoras Unidas exhibió una copia de la declaración patrimonial del presidente Enrique Peña Nieto.
“Aquí está la (declaración patrimonial) de Enrique Peña Nieto. Léanla por favor, la que dijeron que era lo máximo. Yo tengo una copia, me da risa, porque yo sí digo dónde debo, a quién le debo y en cuánto están hipotecadas mis casas”, dijo la funcionaria chapina.
El presidente de México, Enrique Peña Nieto declaró hace algunos meses que, pese a que la legislación mexicana no obliga a hacer la declaración, al divulgarla, “está cumpliendo con un mandato legal y con una obligación ética que normará los actos de quienes somos parte del Gobierno”, lo cual no le favorece a la funcionaria en su país. Recordemos que en su declaración patrimonial, el mandatario reportó ingresos mensuales por 193 mil 478 pesos. Como bienes inmuebles, reportó cinco casas, un departamento y cuatro terrenos; según esto no tiene coches pero sí obras de arte, relojes, joyas y accesorios para casa obtenidos en compras al contado, por donaciones y por herencia. No específica inversiones, cuentas bancarias y otro tipo de valores.
En la entrevista, Baldetti agregó:
“Yo traigo aquí mi declaración patrimonial, quieren verla, ahí está, no tengo nada que esconder. Ahora se ha vuelto el capricho de un medio, un chantajista, porque no le dimos dinero, él fue el que empezó esto y ustedes lo siguieron”.