Fumar es perjudicial para la salud y nos puede provocar cáncer, eso ya lo sabemos. Aunque un nuevo estudio publicado en la revista científica Science fue aun más lejos y demostró cómo cambian las células del cuerpo de un fumador al paso del tiempo: este vicio provoca hasta 150 mutaciones de ADN en las células de los pulmones cada año.
Estas mutaciones PERMANENTES podrían facilitar el desarrollo de ciertos tipos de cáncer. Aunque no es seguro que estas mutaciones provoquen lo provoquen en cualquier persona, un fumador tiene más probabilidades de desarrollar la enfermedad que una persona que no fume.
Y ahí no para el numerito, de acuerdo con los investigadores del Laboratorio Nacional de los Álamos, las mutaciones también afectan muchas otras partes de nuestro cuerpo y no exclusivamente a los pulmones. Por ejemplo, las personas que fuman una cajetilla diaria sufrirán estas mutaciones de ADN cada año:
- 97 en las células de la laringe
- 150 en las células pulmonares
- 23 mutaciones en las células de la boca
- 39 mutaciones en las células de la faringe
- 18 mutaciones en las células de la vejiga
- 6 mutaciones en las células del hígado
Los cambios en las células no son peligrosos por sí mismos, pero cada una tiene el potencial de convertirse en cancerígena. Los expertos dicen que fumar es como jugar ruleta rusa, entre más juegues, hay más chances de que las mutaciones le peguen a los genes correctos y desarrolles cáncer, indica el portal The Verge.
La mala noticia es que estos cambios son permanentes y no se puede dar marcha atrás incluso aunque se deje de fumar y se opte por una vida más sana. Cada quien elige el estilo de vida que quiere llevar y no nos vamos a poner moralinos diciéndoles lo que deben o no deben hacer. Simplemente hay que hacerlo después de estar informado.
