Se desempolvaron viejos recuerdos en la política nacional: la Fiscalía General de la República (FGR) consiguió órdenes de aprehensión contra algunos individuos clave en el fracaso del operativo “Rápido y Furioso”. Entre los principales señalados están Genaro García Luna, Luis Cárdenas Palomino… y el Chapo Guzmán.
Aquel fracaso en la seguridad fronteriza sucedió —aproximadamente— en 2009 , ¿por qué es importante el tema en 2022, más de una década después de que sucediera?
Más allá de la memoria política y de no permitir que una historia como la de “Rápido y Furioso” resulte impune nomás por el paso de los años… los próximos meses serán claves para la relación de México con las armas estadounidenses.
¿Cuál fue el caso Rápido y Furioso?
Si las décadas han oscurecido el recuerdo o te quieres evitar la googleada, el operativo “Rápido y Furioso” fue un fracaso en la política de seguridad fronteriza que arrancó en 2009, durante los gobiernos de Felipe Calderón y Barack Obama.
¿Un resumen? En aquellos años, la Oficina de Alcohol, Tabaco, Armas de Fuego y Explosivos (ATF) de Estados Unidos arrancó un proyecto para permitir la entrada de armas a México, rastrearlas y —según ellos— poder detener las redes de compra/venta en la frontera de los dos países.
Entraron a México cerca de 2 mil 500 armas de alto calibre y apenas 500 fueron identificadas.
El resto ha recorrido las calles de nuestro país, avivando la violencia, participando en una buena cantidad de balaceras y por supuesto, se han cometido algunos asesinatos famosos con ellas. Como el que tronó el abarrote del operativo “Rápido y Furioso” a finales de 2010 y sacó las fallas a la luz pública: la muerte del agente fronterizo estadounidense Brian Terry.
Ambos lados de la frontera han preparado casos penales contra los organizadores y quienes permitieron este operativo fallido.
¿Por qué es importante en México y en 2022?
Además de los nombres de los implicados, como Genaro García Luna o Luis Cárdenas Palomino —ambos funcionarios del gobierno ed Felipe Calderón—, y la participación del Cártel de Sinaloa, con el Chapo Guzmán como uno de los señalados, hay otros detalles importantes de la historia de “Rápido y Furioso” que vale platicar en 2022.
Y es que, recordemos, México está demandando a los fabricantes de armas en Estados Unidos.
La demanda está avanzando en el estado de Massachusetts y a finales de enero de este 2022 se termina el plazo de los alegatos iniciales.
Las empresas que fabrican las armas que llegan a las calles de México —en algunos casos con la bendición gubernamental, como con “Rápido y Furioso”— aseguran que nunca se ha demostrado su participación, que la venta de sus armas se hizo de manera legal y que no hay bases para que el gobierno mexicano los demande.
Mientras tanto, México asegura que fueron negligentes y que sus prácticas comerciales han causado violencia y muerte en nuestro país.
¿Un detalle importante? Además de exigir que se termine el tráfico de armas o se aprieten las reglas para su venta, también se pidió una compensación monetaria por las décadas de violencia que… aunque no hay una cifra oficial, ha llegado a cantidades desorbitares cercanas a los 10 mil millones de dólares. Ouch.