José Ramón López Beltrán, el hijo incómodo de AMLO, no sale de una cuando ya se metió en otra. En redes se desató una fuerte polémica en torno a él por su presencia en un hotel de lujo allá en el bello puerto de Acapulco.
Trataron de “quemar” a José Ramón López Beltrán en hotel de lujo de Acapulco
Todo comenzó precisamente por eso. Alguien lo captó en el Hotel Banyan Tree Cabo Marqués. Como es habitual en la era de las redes sociales, le tomó algunas fotos a él y a su familia con la intención de “quemarlo” en redes.
Y funcionó. Twitter no tardó en llenarse de comentarios, memes y otra clase de menciones sobre la forma en que vive José Ramón López Beltrán; todo basándose en que su padre insiste en que su gobierno es todo un ejemplo de austeridad.
Pero él salió más listo y dijo que le tomaron las fotos por clasismo y racismo
Ahhhhh pero qué dijiste, seguro eso le afectará o saldrá a explicar que todo viene de su trabajo como aquella famosa “Casa Gris”… pues no. José Ramón López Beltrán aplicó una más chida y le dio vuelta a la situación. Acusó clasismo y racismo de parte de quien le tomó las fotos a él y su familia.
A través de su cuenta de Twitter, el hijo de AMLO reconoció que estuvo en el Banyan Tree Cabo Marqués de Acapulco. Señaló que lo hizo para ver el atardecer desde ahí con su familia, pero a las personas que le tomaron las fotos no les agradó su presencia por un tema de racismo.
“Estuvimos en Acapulco. Fuimos a ver el atardecer en ese hotel con vista espectacular. Nos tomaron fotos una familia que al parecer no les gustó que estuviéramos ahí. Ojalá el clasismo y el racismo se acabé en México“.
Y no fue la primera vez en todo el día que José Ramón se quejó por eso de que le anden tomando fotos. López Beltrán subió otro tuit horas antes con el mismo tema pero en un restaurante de mariscos de Sinaloa. “A la próxima pidan unas fotos con nosotros”.
Algunos defensores eternos de la 4T reaccionaron en apoyo al hijo de AMLO. Epigmenio Ibarra fue uno de ellos (qué sorpresa).